En un mensaje que ofreció a los veracruzanos la tarde de este miércoles desde palacio de gobierno, el mandatario reconoció que ante las retenciones que hará la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), para cubrir los pagos por adelantado, disminuirán los recursos para Veracruz.
Por lo anterior adelantó que ante esta situación y la negativa de la reestructuración, para el mes de agosto no habrá recursos para pagar a maestros estatales, burócratas, médicos, enfermeras y policías, lo que obligará a cerrar escuelas y hospitales, así como también suspender el servicio de seguridad pública.
“Si no logramos reestructurar nuestra deuda, lo que va a suceder es que se adelantarán el pago de los créditos y muy probablemente en pocos meses tendríamos detenidas las participaciones federales en más de 60 por ciento; serian retenidas por la Secretaría de Hacienda; en agosto estaríamos con un 100 por ciento de las participaciones federales retenidas, porque todo iría destinado al pago anticipado de la deuda”, adelantó.
Explicó que la contratación de la deuda en la pasada administración de Javier Duarte fue con una taza de interés de 9.5 por ciento, cuando a nivel nacional los estados que contrataron estos esquemas pagan el 7 por ciento.
“B- una calificación 10 niveles abajo, bajó 10 niveles y así nos entregaron las finanzas públicas, lo más grave será si el monto de la deuda y los montos que tenemos que pagar los veracruzanos por esa deuda; a nivel nacional los porcentajes de los demás estados va por 7 por ciento, la deuda de Veracruz la contrató Duarte con la complacencia de los diputados a 9 por ciento”, dijo y explicó que si desde enero se hubiese aprobado la reestructuración se habrían ahorrado varios millones de pesos.
“Si se hubiera aprobado hubiéramos ahorrado mil 600 millones de pesos, es decir habríamos tenido mil 600 millones de pesos más para atender necesidades de los veracruzanos, si se hubiera aprobado en enero la reestructuración nos hubiéramos ahorrado 150 millones de pesos en un gobierno estatal que tiene sus finanzas absolutamente comprometidas, son 25 millones de pesos diarios que nos hubiéramos ahorrado”, puntualizó.
Afirmó que se estudian todas las opciones y alternativas posibles, donde se plantea una disminución al Congreso del Estado que cuenta con 700 millones de pesos a un 50 por ciento, para lograr un ahorro de 350 millones.
Asimismo, menciono que continuarán con el plan de austeridad en todo el gobierno para poder hacer frente a esta situación donde no descartó acudir al Congreso para explicar personalmente a los legisladores la necesidad de reestructurar y se vuelva a votar esta propuesta.
“Hicimos un ajuste y vamos a continuar con el, pediremos al Congreso que lo haga, el funcionamiento del Congreso cuesta 700 millones de pesos; vamos analizar la posibilidad de ir a negociar directamente con la banca. Que reflexione el Congreso; si quiere que vaya el gobernador a explicar el por qué es necesaria la reestructuración”, dijo y afirmó que no cesará en su esfuerzo para lograr las alternativas que requiere el estado para salir de esta situación.
“No voy a dar mi brazo a torcer, fui electo para hacer el cambio en Veracruz, no vamos a mentir, lo negativo sería que no le dijera la verdad a los veracruzanos, tampoco daré mi brazo a torcer a quienes le quieren doblar el brazo al gobernador, haré lo que sea necesario, no descarto ninguna opción, ninguna alternativa. No reestructurar la deuda solo beneficia a los bancos, los banqueros son los únicos que se ven beneficiados”, dijo y lamentó que el PRI, así como MORENA politicen el asunto.
Descartó que haya falta de operación política y reiteró su disposición de acudir ante el Congreso local para dar cuenta a los legisladores sobre esta propuesta, donde insistió en que es una acción más para hacer frente a la situación financiera de la entidad, pues no representa la única solución.
(Agencia Los Editores) | 
