Conforme pasan las semanas, la vida política se torna más complicada en este municipio y los aspirantes a ocupar el espacio de Ricardo Arturo Serna Barajas tendrá que dejar el último día del 2017 son cada día más, las aguas están muy revueltas, se ha hecho todo un remolino, políticos y simpatizantes ya andan alborotados y con deseos de conocer a cuál de todos los aspirantes elegirán el próximo primer domingo de junio; en el partido azul los astros apuntan a que quienes competirán por alcanzar la nominación panista son Roberto Cortez Hernández, actual director de educación y Raúl Monroy Hernández, director de fomento social, aunque algunos maquiavélicos aseguran que en caso de darse de nueva cuenta la alianza PAN-PRD alguien de ojiverde, que por sus venas corre sangre roja pudiera hacerse una trasfusión   sanguínea de color azul, esto debido dicen a la excelente relación que este sostiene con el gobernador electo Miguel Ángel Yunes Linares, pero eso ya lo veremos, mientras tanto los panitas hacen lo suyo y a Raúl Monroy ya se adelantó con la colocación de un espectacular  allá por el rumbo del colotero en el que dice que “ama mucho a Álamo”, por su parte, Roberto Cortez sigue su labor de gestoría con los hermano migrantes en quienes ha encontrado un buen mercado electoral, pues sabe que sus familias podrían corresponderle a la hora de emitir el voto; y ese ojiverde del que les hablo, de nombre Juan Bustillos Montalvo, por si no daban quién es espera pacíficamente solo observando el vaivén de las olas y en espera de que baje la marea política, pues el muy hábil no lo hace el feo al Partido Revolucionario Institucional y si no s él, se conformaría con que el ungido de ese partido sea su “cuatacho” y diputado federal Paulino Alberto Vázquez Villalobos, este último por cierto, me cuentan que ya se puso las pilas y viene visitando varias comunidades del municipio para conocer más de cerca la problemática de los hombres dl campo y de esa manera en caso de resultar primero candidato y después alcalde electo, integrar un plan de desarrollo municipal en el que se involucre todos los sectores sociales, políticos y empresariales de la ciudad, para ello el legislador ha empezado a integrar un equipo de trabajo con el que piensa dar la batalla el año entrante; por su parte, Balfrén González Montalvo hace los suyo y con la bendición del senador Héctor Yunes Landa, viene redoblando esfuerzos  junto con su siempre leal equipo de trabajo el cual tiene un vasto conocimientos en que quehacer del proselitismo electoral, González Montalvo cuenta con la aceptación en el medio rural debido a los muchos años de lucha que lleva en las filas cenecistas en donde ha enfrentado batallas a lado de los campesinos siempre buscando  siempre el bienestar de los hombres y mujeres del medio rural; quien no se queda atrás y también levanta la mano es Francisco Ríos Alarcón, quien asegura que tiene las suficientes “canicas” para ganar el juego aunque ya advirtió que de no ser el elegido por su partido podría abandonar sus filas, cosa que sus compañeros priístas aseguran que solo es una forma de querer espantar con el petate del muerto, esta advertencia ya la hizo en alguna ocasión y le salió pero que no la vulva a repetir, al menos eso dicen sus mismos compañeros, ya veremos en esta ocasión la postura que tomará de no ser candidato el tlachichilquense. Y para esas mujeres que piden a gritos que sean tomadas por ese partido como una posibilidad para convertirse en sus candidatas porque argumentan que llevan muchos años de priístas, sin mencionar nombres, yo quisiera saber en qué parte del país han hecho el trabajo político del PRI si un servidor ha vivido todas y cada una de las campañas desde la época de Noé Ortega Martínez como primer diputado federal por el entonces XVIII distrito electoral, pasando por son Silverio R. Alvarado, Rebeca Arenas Martínez y muchos más a excepción de las campañas de Everardo Paíz Morales  y Roberto Álvarez Salgado y en lo que corresponde a las diputaciones locales desde la época de don Raúl Luna Núñez, Cesar Alberto Martínez (alias el Pingüino), Lucio Martínez (alias el Cachetes)  y algunos otros como don Paulino Vázquez y Juan Bustillos, y en todas esas campañas si puedo nombrar a mujeres como la profesora Raquel Mejía Viniegra, la maestra Blanca Arminada Batalla, a quien por cierto, a nombre mío y de mi familia  le deseamos nuestros mejores  deseos de recuperación, la extinta empleada municipal Silvia Segura Olivares, la finada doña Emma Hernández de Hervert   de la comunidad de Sombrerete, una señora quien llamaban Leoba de la comunidad de Rancho Nuevo, Evelia González Sánchez, Gildarda Romero Ángeles, Gloria Segura Olivares, Marbella Olvera Gallegos y una profesora de la cual solo recuerdo su nombre que habitaba en Estero del Ídolo de nombre Yolanda, mujeres que entregaron gran parte de su vida a la defensa de su partido y que hoy su partido ni siquiera se ha dignado en rendirle algún homenaje en reconocimiento a toda esa labor que hicieron en las mesas receptoras de voto y en algunos casos en las comisiones electorales respectivas a lado de hombres como Cástulo González Hernández, don Enrique Saavedra Utrera, Roberto Jerez Hernández, Herminio Flores Viniegra  y desde luego Edmundo Navarro Alejandre, el profesor Aureliano García Mendo y Jaime  Caballero Carballo así como Roberto Guzmán Guerrero y Nabor Mejía Viniegra, priístas llenos de pasión, entregados a la promoción y defensa de su partido, esos eran las auténticos militantes  a los que no les importaba recompensa alguna  para dar la cara por su partido como hoy en día que todos los que se aceran al PRI sólo lo hacen para obtener beneficios económicas, materiales o algún cargo público. 

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