El sector automotriz es fundamental para México. ¿Qué panorama compartes?

La industria automotriz en México es una de las turbinas de la economía mexicana y va más allá del TLCAN. Incluso esta, fue la base para tener el TLCAN. Ha sido uno de los ejemplos claros de la “mano visible” del mercado que desde el gobierno orientó responsablemente los fundamentos de producción. López Mateos por medio de los decretos presidenciales que fundamentaban la producción, inició una carrera de éxito que hoy permite a México ser el 7 productor mundial de vehículos, el 4 exportador y tener 15º. Mercado interno además de generar más divisas que el petróleo, remesas y turismo.

¿Qué viene ahora ante un probable fin del TLCAN?

Fortalecer el mercado interno y profundizar la difícil estrategia de diversificación a otros países. México requiere respaldar su reserva interna frente a los vaivenes del exterior. Tenemos acuerdos comerciales que nos permiten aumentar destinos de exportación y remontar situaciones reales y dramáticas de dependencia con EEUU. Por ejemplo, con Texas que es destino de más vehículos armados en México que países como España.

¿Más coches, más tráfico?

No. Se trata de renovar el parque vehicular con mejores tecnologías, eficiencia energética, respeto medio ambiental. Tenemos un parque vehicular obsoleto y contaminante de casi 2 décadas de vida. De la mano de un mejor sistema de transporte público, lograremos transitar a una mejor movilidad.

¿Cómo desarrollar el mercado interno?

Financiamiento automotriz que después de la reforma financiera ha sido sumamente positivo y que el gobierno federal no decaiga en el control de importación de usados desde EEUU. Que entre lo que sirve, pero de ninguna manera podemos ser el basurero automotriz del vecino del norte. En el largo plazo, la experiencia de otros países en políticas públicas de renovación de parque vehicular donde todos los sectores participen.

¿Qué enemigos tenemos además de Trump en el tema automotriz?

Trump, no será eterno y México tiene muchas capacidades para crecer. Enemigos internos como el oprobio de estructuras clientelares en partidos políticos que insisten en importar chatarra de EEUU, es un enemigo abierto. Otro enemigo, es nuestro rezago en infraestructura logística: privatizamos lo que había, no generamos nueva infraestructura. Otro enemigo que ha dicho la industria, es la necesidad de mejores cuadros técnicos. El potencial es enorme en la juventud mexicana, pero se debe fortalecer.

Veracruz ¿cuándo tendrá una armadora? Pudo tener la VW en el pasado.

El pasado es inerte.  Un gobernador decidió que no era propicio que VW se instalara en Veracruz, …. En ese momento Veracruz, era un país… Las decisiones de inversión provienen con diversos indicadores que van desde la posición logística, gobernabilidad, rendición de cuentas, interconectividad, calidad del empleo, gobernabilidad laboral, entre otros. Si Veracruz trabaja en esos indicadores, podrá ser un polo importante a largo plazo.