Y es que la delincuencia organizada deprimió la economía de esa región sureña al extorsionar y ahuyentar a pequeños y medianos inversionistas privados, a lo cual se sumaron los recortes presupuestales de la Federación que provocó el despido de miles de trabajadores de la industria petroquímica paraestatal, y el Ayuntamiento porteño no ha hecho gran obra pública porque la administración estatal anterior les mochó y retuvo las participaciones federales.
De no haber sido acribillados el sábado 24 de junio cuatro menores de edad junto con sus padres en Coatzacoalcos, cuyo crimen tuvo repercusión nacional porque ocurrió el mismo día en que en ciudad Cardel fue ejecutado el comisionado estatal de la Policía Federal, Camilo Castagné, y dos oficiales más de la PF, seguramente Martínez Zavala seguiría delinquiendo libremente en el sur de la entidad.
Ahora habrá que ver si luego de la detención del “Comandante H” disminuye la inseguridad en esa región del sur de Veracruz y si su grupo criminal también es desmembrado, no vaya a ser que solamente sea sustituido por otro empoderado cártel de la delincuencia organizada.
REFORMA JUDICIAL, SÍ VA
Aunque en su sesión de este martes el pleno de la LXIV Legislatura local desahogó otros asuntos y no le dio entrada al proyecto de iniciativa de reforma del Poder Judicial que le fue turnado por el titular del Poder Ejecutivo, fuentes confiables del Tribunal Superior de Justicia del Estado nos confirman que la reestructuración del TSJE sí va, y que la Cámara de Diputados sólo difirió por el momento su primera lectura ante la inconformidad que aún persiste entre algunos miembros de la judicatura veracruzana.
Y es que dicha iniciativa de reforma obligaría a jubilarse al menos a 16 magistrados que rebasan los 70 años de edad, así como a decenas de jueces que tienen más de 60 años de vida, que sería el límite para pensionarse. |