Publiqué el jueves pasado: “Se cocina ya, está en el horno, a punto de salir calientito, el acuerdo de unidad que firmarán los aspirantes a la candidatura del PRI al Gobierno del Estado. No tarda, por mero y sale con la rosca de reyes. Será previo a la convocatoria para el registro de precandidatos o precandidato, que será en la tercera semana de enero, o sea en menos de veinte días”.
Mediante su cuenta de Twitter, el gobernador Javier Duarte de Ochoa, jefe político de su partido en el estado, felicitó anoche a “@HectorYunes, ?@Pepe_Yunes, ?@Beto_Silva_R y ?@ericklagos por su compromiso y altura de miras. ?#UnidadPRI”, por haber firmado un Acuerdo de Unidad que llevarán el próximo jueves al presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones.
Por fin, así, quedaron totalmente claras varias cosas. Una, que sólo dos, y nada más que dos de sus amigos y cercanos colaboradores, Alberto Silva Ramos y Erick Lagos Hernández, estuvieron y han estado en su consideración para que sean quienes lo puedan suceder.
Otra, que de acuerdo al contenido del documento firmado, no será el gobernador Duarte quien decida el nombre del candidato, sino el Comité Ejecutivo Nacional del PRI, que formalmente preside Manlio Fabio Beltrones pero cuyo líder natural es el presidente Enrique Peña Nieto.
La tercera, que Tomás Ruiz habría sido solamente un distractor y lo habría utilizado su jefe para el juego y rejuego de nombres y especulaciones, pero el acuerdo dado a conocer anoche lo descarta en forma definitiva. Nunca estuvo en su ánimo.
La cuarta, lo mismo Jorge Carvallo Delfín que Adolfo Mota Hernández y Flavino Ríos Alvarado le sirvieron sólo de relleno el pasado 29 de diciembre cuando se reunió a comer con todos ellos en la Casa Veracruz y se manejó la versión que de ese grupo saldría el próximo candidato, con lo que en apariencia los encartaba a todos. Sólo estaba jugando con ellos. Ahora queda en claro que los llevó para echarle montón a Héctor Yunes, el único ajeno al grupo.
En su parte sustancial, el acuerdo revelado anoche dice que: “Estamos convencidos de que es momento de establecer un Acuerdo de Unidad por el futuro de Veracruz, que garantice que la unidad en la inclusión sea el compromiso que sellaremos apoyando el registro de un solo aspirante, en el momento en que el CEN defina los términos de la convocatoria para seleccionar a quien resulte candidato”.
Agrega: “Ese compromiso de unidad continuará durante el proceso de campaña y se refrendará cuando construyamos el próximo gobierno, con la seguridad de que jamás aceptaremos una candidatura por un partido distinto al que militamos, que nos ha dado tanto y al que mucho debemos”.
Y remata: “Estamos seguros de que el Comité Ejecutivo Nacional que usted encabeza, considerará todos los elementos a su alcance para tomar la mejor decisión, para resolver e informarnos quien es la, o el aspirante que habrá de encabezar la unidad con inclusión, al momento de registrarlo como nuestra candidata o candidato a gobernador”.
Por normatividad estatutaria, será a partir del miércoles 13 cuando se pueda expedir la convocatoria para el registro del candidato de unidad. Ahora ya se tiene la seguridad que será uno solo y que los no favorecidos se comprometieron a no jugar por otro partido, aunque una atenta lectura del documento muestra que no hay ningún candado para que, en un momento dado, puedan buscar la candidatura como candidatos independientes.
Sin embargo, será hasta la tercera semana de este mes cuando se expida la convocatoria, que puede ser a partir del 20 de enero en adelante, pero no antes, y la nominación formal del candidato sucederá hasta los primeros días de febrero, cuando se celebre la convención que elegirá al abanderado.
¿Por qué en forma repentina el Twitter del gobernador? Una fuente bien informada de la prosperidad me dijo anoche que era para descalificar el supuesto destape que por la mañana hicieron en el rancho Rosa del Alba, propiedad del dirigente estatal de la Liga Agraria, Juan Carlos Molina Palacios, en el municipio de Medellín de Bravo, acto al que estaba invitado Alberto Silva Ramos, quien simple y sencillamente decidió no asistir.
Al grito de: “¡Estamos listos!”, fue el propio dirigente agrario en la entidad y compadre de Héctor quien dio el toque de arranque, retomando la misma proclama con la que remató el senador Yunes Landa su segundo informe de actividades el pasado 19 de julio. El acuerdo que ya se firmó es de unidad y el propio Silva anda proclamando por todo el estado la unidad, pero, por lo que se advierte, es lo que menos existe entre los tricolores.
En efecto, la comida de ayer en Medellín, que empezó desde las once de la mañana, tuvo claros signos de apoyo al senador Héctor Yunes Landa, incluso sí asistió la mayoría de los diputados locales priistas encabezados por su pastor Juan Nicolás Callejas Arroyo, todos los ediles de extracción campesina tricolores, alcaldes de extracción cardenista, militantes del Partido Verde Ecologista de México y el diputado del AVE, Francisco Garrido Sánchez, así como, entre otras, la recién apapachada por el propio presidente Peña el pasado 6 de enero, Martha Montoya Barradas, todos ellos quienes ante la proclama de Juan Carlos Molina de “¡Estamos listos!” dieron de inmediato un paso al frente.
¿Algunos nombres? Personajes identificados con la corriente fidelista-duartista, como Vicente Benitez, Tarek Abdala, Tonatiuh Pola, Raúl Zarrabal, Anilu Ingram, Alfredo Gándara, Gladys Merlín Castro, Juan Cruz Elvira y hasta el hermano del gobernador, Cecil Duarte de Ochoa. También, el dirigente estatal del Fesapauv, Enrique Levet Gorozpe.
Fueron poco más de mil cien comensales, quienes degustaron chicharron acompañado de “pico de gallo”, circularon algunas cervezas de “cuartito” (pocas porque la mayoría de los presentes quería una taza de café caliente), “envueltos” de barbacoa y refrescos Jarritos de sabores.
Anoche fue definitorio para mostrar que el PRI está dividido exactamente a la mitad. Por un lado está el grupo oficial que empuja para ser candidatos a Alberto Silva Ramos y a Erick Lagos Hernández, y por el otro, todos los demás que no quieren que continúen en el poder y que hacen causa común con los senadores Héctor Yunes Landa y José Francisco Yunes Zorrilla.
También queda claro por ahora que hasta que no rinda protesta estatutaria cualquiera de los cuatro firmantes, no hay nada definitivo, y que el hecho de que el nombre se vaya a conocer hasta los primeros días de febrero es porque el grupo en el poder, haciendo uso del poder político que tiene en sus manos, va a alargar lo más que pueda el proceso interno con la intención de que ya sea Erick o Alberto crezcan ante el electorado y tengan argumentos ante el CEN para alegar que tienen derecho a la candidatura.
El Twitter de Duarte ayer al anochecer llevaba toda la intención de decir a los Yunes rojos que todavía no se sientan muy seguros. Lo dicho, si Héctor llega, será a costa de esfuerzo, sangre, sudor y lágrimas, como dijera el héroe de la Segunda Guerra Mundial, Sir Winston Churchill. |