Veracruz ocupa el tercer lugar a nivel nacional en diversidad de anfibios, con 103 especies reportadas, grupo que comprende sapos y ranas, salamandras y ajolotes, así como cecilias, habitantes de lugares húmedos con cobertura vegetal conservada y asociados a cuerpos de agua dulce.

Sensibles a cambios en el medio ambiente, la presencia o ausencia de estos ejemplares evidencia la calidad del sitio en el que viven. Entre las principales causas de disminución de sus poblaciones están la infección de hongos (triquidiomicosis), la contaminación y la introducción de animales exóticos que los depredan.

Asimismo, algunos anfibios tienen importancia culinaria y para la salud, pues son aprovechados como fuente de alimento y en el desarrollo de productos médicos a partir de segregaciones producidas por su piel.

En la entidad se han registrado más de 30 especies endémicas, en su mayoría ranas arborícolas y salamandras o tlaconetes. Este tipo de fauna habita en los bosques ubicados entre el Pico de Orizaba y el Cofre de Perote, donde usan las bromelias como refugio y sitio de reproducción.

Por otra parte, los bosques de pino y encino de la Sierra Madre Oriental son el hogar de las salamandras de la familia Plethodontidae, que se caracterizan por no poseer pulmones y respirar por la piel.

Se estima que en el mundo hay cerca de seis mil 333 especies de anfibios y México ocupa el quinto lugar en diversidad, con aproximadamente 365 clases, de las cuales, más de la mitad corresponden a ejemplares endémicos.