Estamos a la mitad de las campañas y la visión que tenía de la contienda al principio, a estas alturas seguramente deberá haber cambiado. Los candidatos a gobernador están esperando el segundo envión que puedan recibir ahora de los candidatos a diputados. La buena o mala actuación de estos será la que determine los derroteros de la elección. Quienes están pasando serios problemas son los de la coalición PAN-PRD, porque en la coalición del PRI, bien o mal prácticamente ya tienen resueltas sus diferencias en los 30 distritos y en las listas plurinominales. Sin embargo, en el PRD no hay tregua, Freddy Ayala ha desatado una guerra intestina que amenaza con dividir al PRD. Al momento, por poner un ejemplo, hay dos listas de candidatos a diputados plurinominales y serán las autoridades electorales las que tendrán que dirimir cuál es la válida, pero esto augura que termine como termine el entuerto, no podrá quedar bien la militancia. Y si a eso le sumamos que en varios distritos los candidatos uninominales son más bien cartuchos quemados, pues la cosa se pone intensa. ¿Serán las diputaciones el talón de Aquiles de la coalición “para rescatar Veracruz”? Por lo pronto mañana comienzan todos y la mayoría lo hará en punto de las 0 horas. Solo les quedan 30 días. No hay tiempo que perder.