El recién nombrado obispo auxiliar de Xalapa, José Rafael Palma Capetillo, aseguró que los matrimonios entre personas del mismo sexo y el permitirles adoptar, es un atentado contra los niños, la naturaleza y la dignidad de la persona pues los infantes tienen derecho de tener una madre y un padre.

"Aquí hay un reclamo muy fuerte que hace la naturaleza y la ley de Dios, de que lo que creó Dios desde el principio que es la unión del hombre y la mujer no puede ser contradicho".

En ese tenor, el prelado aseveró que la iglesia no está en contra de nadie pues respeta a las personas con sus preferencias sexuales aunque insistió en que el matrimonio está fundado específicamente entre la unión de un hombre y una mujer.

Agregó que un niño necesita del cuidado, amor y educación de una familia que esté conformada por un matrimonio formado entre un hombre y una mujer.

"Todo niño y toda niña tiene derecho a tener la figura de un papá y de una mamá que le den origen dentro del matrimonio y eso hay que defenderlo y sostenerlo, entonces hay cosas que pueden ser propuestas para comprender a las personas que viven algunas situaciones diferentes, pero al mismo tiempo el valor de la familia no puede perderse, no puede cambiarse, si cambiara sería una ley injusta y estaría atentando contra la dignidad de la persona, del matrimonio y de los niños que hay que defenderlos\".

Para el obispo auxiliad si bien se puede tener el deseo de convivir con una persona y se es libre de hacerlo, exigir que se reconozca la legalidad de matrimonio o una unión que no es del hombre y la mujer, contradice la dignidad de la persona.

"Hay algo que contradice la dignidad de la persona porque cada quien debe de reconocer lo que es, lo que puede llegar a ser y lo que son verdaderos derechos, entonces no exigir algo que no lo puede dar la naturaleza, ni será nunca bendecido por Dios, ni se pueda igualar a la dignidad del matrimonio".

De esa forma reiteró que no vale la pena tener una legislación de este tipo y si se hace es injusta, "la conciencia les debe reclamar", por lo que consideró que se debe levantar la voz \"y no dejar que proceda algo que va a contradecir la verdad".