Las ciudades latinoamericanas tienen analfabetismo ambiental, requieren planeación urbana estratégica con sentido ecológico ante las excesivas planchas de cemento y tala de árboles que acentúan el calor y contribuyen al calentamiento global y al cambio climático. El vicepresidente de la Red Universitaria Internacional de Población, Desarrollo y Medio Ambiente y catedrático de la Universidad de La Habana, Gilberto Javier Cabrera Trimiño, aseveró que ese problema exhibe la carencia de políticas públicas ecológicas. Aclaró que no es casual el que la mayor vulnerabilidad ante el cambio climático esté en las sociedades con menor desarrollo, entre ellas las de América Latina, a diferencia de las de Europa.
“Los países de menor desarrollo tienen menor cultura, las políticas públicas no internalizan las cuestiones ambientales y hay una mayor desidia ambiental. En función de eso estamos tratando de elevar la calidad de la cultura ambiental. “Un terremoto, un tsunami en Japón no tienen el mismo efecto que en nuestros países, por el nivel de desarrollo ecológico. Debemos lograr eso, contribuir a la cultura de la sostenibilidad, porque sin sostenibilidad no hay gobernabilidad”, subrayó Cabrera. A pregunta expresa sobre ciudades como Veracruz, donde aumenta la plancha de concreto y cada vez hay menos árboles dijo que eso es consecuencia de la escasa conciencia verde. “Por eso hablamos de analfabetismo ambiental: el que las políticas públicas no tengan en cuenta la importancia del medio ambiente como base fundamental para el desarrollo de la calidad de vida es lo que está pasando ahora. “Al tener la jungla de asfalto y no tener básicamente la relación entre población, calidad de vida y ambiente, ese desconocimiento, la falta de una cultura y sensibilización ambiental trae como resultado todas esas cosas”, señaló Cabrera Trimiño. A esa falta de planeación estratégica urbana y al analfabetismo ambiental atribuyó el hecho de que se construyan conjuntos habitacionales en zonas no aptas, generalmente inundables o en laderas proclives a deslaves. Explicó que la planeación estratégica va acorde con la cartografía del peligro, consistente en detectar las amenazas y probables desastres para una zona cuando no se tiene en cuenta la actitud funcional del medio ambiente. |