Nosotros no sabemos de lo que se nos está culpando; fuimos despedidos injustificadamente”, aseguraron docentes del Instituto Tecnológico Superior de Coatzacoalcos (Itesco) que fueron cesados de su cargo la semana pasada.

En rueda de prensa, señalaron que fueron despedidos por el director José Luis Sánchez Toral por haber levantado la voz, y pedirle que hiciera su trabajo en beneficio de la institución.

Los seis maestros afectados, recordaron que fue el pasado 22 de junio cuando, sin previo aviso, no se les permitió la entrada al plantel, bajo el argumento de que sus contratos habían sido rescindidos.

La molestia por la violación de sus derechos laborales, pues ni siquiera les informaron las causas de su despido, los llevaron a bloquear por unas horas la carretera antigua Coatzacoalcos-Minatitlán, para ser escuchados por las autoridades educativas; sin embargo, eso no cambió su situación.

LES NIEGAN ACCESO

De acuerdo con Gregorio Gómez Valles, quien fungía como director académico desde hace 15 años, ni siquiera los han dejado sacar sus pertenencias de las oficinas.

Asimismo, resaltó que en ningún momento se hizo el protocolo de entrega-recepción del departamento.

“¡Nosotros no somos delincuentes! No estamos haciendo nada que no esté dentro de los derechos de los trabajadores”, dijo, y señaló que ya están actuando por la vía legal para llegar a una solución.

Junto a él, fueron cesados de su cargo cinco personas más: cuatro jefes de división y el jefe de estadística, quienes enfrentan el mismo problema.

NO LES DAN MOTIVOS

Minerva Javier Domínguez, exjefa del área económica-administrativa, aseguró que ni siquiera les han comunicado las presuntas faltas en las que incurrieron, por lo que el mismo día en que fueron despedidos, se presentaron con un notario para dar fe de lo sucedido, quien reconoció que el director del Itesco está violando el proceso de notificación.

“El único delito que estamos cometiendo, es levantar la voz para expresar la inconformidad de 7 mil alumnos y todo el personal dentro del Itesco”, externó, y destacó que los más de 50 docentes y administrativos no quieren hablar por temor a represalias.