De los 12 gobernadores salientes en la actualidad de nuestro país, sólo 2 han hecho su declaración, el gobernador de Durango y el de Zacatecas, uno del PAN y el otro del PRI respectivamente. Los faltantes 7 son del Partido Revolucionario Institucional, los otros tres representan alianzas aunque el de Puebla se declara panista, pero los tres, son de cuna priista. Entre los 7 que deben su declaración está Javier Duarte de Ochoa, gobernador de Veracruz que presentó su declaración a esta plataforma el 28 de julio de este año, pero las organizaciones Transparencia Mexicana y el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco) rechazaron el viernes 29 de julio la 3 de 3 del nativo del puerto jarocho por tener abierta una investigación en su contra por parte de la PGR y porque no incluyó los bienes de su esposa, Karime Macías. Duarte de Ochoa se separa del cargo el 1 de diciembre y a cargo se quedará Miguel Ángel Yunes, pero al no ser aceptada su declaración, automáticamente Duarte se convierte en uno de los gobernantes que van de salida y que no tiene su “3 de 3” clara y concisa, lo peor es que la plataforma de esta iniciativa no lo incluye entre los funcionarios públicos del país que han presentado su tres de tres. ¿PORQUÉ SE LES EXIGE? El hecho de ser gobernantes que ya se van en este año o en los primeros meses del que viene, además de ser objeto de señalamientos, polémicas, acusaciones y “escándalos” que tienen que ver con los malos recursos públicos durante sus administraciones los hace servidores públicos candidatos obligatorios a presentar la declaración patrimonial, fiscal y de intereses. Pero es la deuda pública o el aumento de la misma que dejan, el principal motivo por el que la declaración 3 de 3 se les exige a cumplir de manera obligatoria. Tan solo son 177 mil 789 millones de pesos lo que dejan los 12 estados en una suma total. Es decir, un incremento del 161% con respecto al año 2010, año en el que muchos de ellos iniciaron su gestión como gobernantes. De esta suma, Veracruz, Chihuahua y Quintana Roo concentran el 60% de la deuda de los estados que renovarán gobernadores. Javier Duarte, César Duarte y Roberto Borge dejarán a sus sucesores una difícil tarea económica. Entre los tres suman 111,084 millones de pesos de deuda y Veracruz es la entidad con mayor deuda de estos estados que cambiarán de mandatario, se estima que son más de 45 mil 879.8 millones de pesos de deuda lo que deja Javier Duarte de Ochoa. Por lo pronto ya dejó de ser gobernador Francisco Olvera Ruiz, quien el 4 de septiembre pasado le dio la estafeta a su correligionario priista Omar Fayad Meneses en Hidalgo, José Francisco se fue sin presentar su 3 de 3 en medio de señalamientos sobre gastos excesivos durante su mandato como el haber gastado 300 mil pesos en fiestas y asistir al Super Bowl, así también se le acusa de utilizar aeronaves oficiales como transporte personal de su familia para eventos de ocio, transporte financiado supuestamente por el erario público. Así también el pago a 1440 aviadores. Roberto Borge Angulo de Quintana Roo dejará el cargo el próximo domingo y se marchará también sin dejar su 3 de 3, pero detrás de él lo seguirán las acusaciones de enriquecimientos ilícitos y tres propiedades de más de un millón de dólares en valor ubicados en los mejores parajes de Quintana Roo. De acuerdo con el coordinador del Eje de Finanzas y Contraloría, Juan Vergara Fernández, el gobierno de Borge no ingresó mil 928 millones de pesos a los fideicomisos de promoción turística del Estado. LOS DUARTE Después de Veracruz, el gobierno de César Horacio Duarte Járquez es el segundo con mayor deuda heredada, 42 mil 762.1 millones de pesos se estima deja el priista como herencia a Javier Corral el próximo 4 de octubre, detrás de él y al igual que su “pariente” de Veracruz, el enriquecimiento ilícito y una documentada denuncia de hechos por los delitos tipificados por el Código Penal Federal tales como Peculado, Enriquecimiento ilícito, Ejercicio Abusivo de Funciones, uso indebido de atribuciones y facultades lo perseguirán en cuanto el fuero lo abandone. |