La carretera federal libre, en el tramo Jáltipan-Acayucan, debido a lluvias y el proceso de ampliación a cuatro carriles, sigue convertida en un gran caos, debido a los derrumbes en esta temporada de intensas lluvias.
El tramo más complicado es en de la desviación al municipio de Texistepec, hasta la desviación a Soconusco, donde los trabajos de las compañías que obtuvieron las licitaciones de la magna obra, avanzan “a paso de tortuga”, desde hace ya varios meses.
Dicha ampliación a cuatro carriles forma parte importante del las obras pomposamente anunciadas por la federación como “Zonas Económicas Especiales” y el multi-aplazado pero varias veces explotado políticamente “corredor Transístmico”, que no se sabe cuándo, unirá con vialidades de primee mundo, a los puertos de Salina Cruz y Coatzacoalcos.
Mientras, el sufrimiento es la situación constante de conductores particulares y del servicio público, que no pueden o no quieren viajar en la bien bautizada y cara “autopista de la muerte”.
Debido a esto son pocos los turistas que buscan visitar la zona turística de la Cuenca Olmeca del municipio de Texistepec, donde existe un museo en la comunidad de San Lorenzo Tenochtitlán. |