Con la acción histórica del PRI se inició la temida cacería de brujas y, de pronto y de pura casualidad, se acuerdan de Miguel Ángel Yunes Linares, Gobernador Electo de Veracruz. En privado, el líder Nacional del PRI, Enrique Ochoa Reza, dijo a Amadeo Flores Espinosa, líder estatal del mismo partido, que el combate a la corrupción dentro de su partido va en serio. “Se va a vigilar a todas los gobiernos emanados del partido y se les va a exigir que rindan cuentas en serio y empezamos por nuestra gente. Solo así tendremos calidad moral para poder a exigir lo mismo a los demás partidos. Vamos a exigir que la Fiscalía Anticorrupción investigue por igual a gobernantes de otros partidos que hayan sido denunciados por actos de corrupción”. Como se apuntó ayer en este mismo espacio, ese parece ser el objetivo de iniciar con la suspensión de derechos partidistas a funcionarios de Veracruz, pues algo similar expresó el diputado federal priista Jorge Carlos Ramírez Marín cuando dijo que “hoy se rompen y rasgan las vestiduras y se rompen el pecho a golpes hablando del gobernador del PRI, pero tenemos casos de gobernadores del PAN y el próximo Gobernador de Veracruz es uno de esos que se han escapado de estos procesos por la vía de la impunidad”… lo dicho ayer aquí mismo ¿Qué contestarán ahora los de otros partidos cuando Ochoa Reza les diga “nosotros ya cumplimos y ustedes cuándo?”