Hace unos días se suscitó una gran polémica debido a las cifras del daño patrimonial a las finanzas de Veracruz ofrecidas al público por los diputados Julen Rementería y Francisco Garrido:  secretario y presidente de la Comisión de Vigilancia del Congreso. El primero dijo 9 mil millones de pesos y el segundo de 14 mil, -solo de la Cuenta Pública del año 2015-. Pues déjeme decirle que la cifra exacta del daño real quizá jamás se llegará a saber por lo siguiente: Del 2010 al 2014 hay un hoyo negro del que es responsable el Auditor Lorenzo Antonio Portilla Vázquez, quién con sus artes de mago, desapareció cualquier dato el daño. Le tapó todo a Duarte y su Pandilla. Sabemos del daño a los dineros federales del 2010 al 2013 fue de 35 mil millones de pesos porque los reportó la ASF, pero Portilla no dijo ni pío. Habría que agregar 100 mil millones de deuda pública que de la cual Portilla solo reconoce 60 mil. Pero falta que ORFIS revise 2016 y la ASF diga cuánto se robaron estos desalmados del 2014 al 2016. Si le sumamos así a ojo de buen cubero el daño patrimonial podría llegar al menos a casi 150 millones de pesos más lo que se acumule.