El economista Keynes decía que si le debes poco a los bancos, estos te tienen en sus manos. Pero si le debes mucho, los banqueros son los que están en tus manos. Aplicando el silogismo, Clementina Guerrero debe mucho y no tiene, entonces ¿De qué se preocupa? “Debo no niego, pago no puedo”, y nadie está obligado a lo imposible. El problema es que a estas alturas del partido no se escucha algo congruente con la situación que se vive en Veracruz. No se oye por ejemplo que esté negociando con los bancos algún tipo de reestructuración que le de aire al presupuesto del próximo año, menos se sabe que se esté diseñando alguna reingeniería de la burocracia. No se sabe cuáles Secretarías, subsecretarías, direcciones generales o qué OPD’s tendrán que desaparecer. Ni mucho menos se sabe de algún Plan de Austeridad. El tiempo corre, dos años son muy poco tiempo, pero se contará con al menos 100 mil millones de presupuesto al año, con los que bien manejados podrán hacer maravillas… pero nada se logrará si se sientan a llorar las desgracias. Desgracias, que por cierto, ya se sabían.