Vecinos de la colonia Luz del Barrio acusaron que el Residencial “El Encino” se construyó en un área natural protegida de Xalapa gracias al respaldo de autoridades federales, estatales y municipales.

Al respecto, la vecina Angélica Acosta Morales, integrante del grupo Custodios del Archipiélago Xalapa, explicó que el pasado 5 de enero de 2015 se decretó área protegida, en la categoría de corredor biológico multifuncional, a un archipiélago de bosques y selvas de la región.

Se trata de 7 polígonos ubicados en la zona establecida como reserva ecológica restrictiva de la zona conurbada Xalapa-Banderilla-Coatepec-Emiliano Zapata-Tlalnelhuayocan.

Pese a lo anterior, dijo la mujer, en una fracción de terreno protegido de la ciudad se construyó dicho fraccionamiento compuesto de 25 casas.

Por ello, comentaron que podría existir un tráfico de influencias, tanto del ayuntamiento e instancias como la delegación de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente y la Secretaría de Medio Ambiente del Estado.

Acosta Morales alertó que incluso se planea la construcción de 2 edificios más y para esto los encargados de la obra buscan talar árboles que se encuentran afuera del terreno en donde realizaron su primer proyecto.

La residente señaló a José Rafael Vista Hakim como el dueño del fraccionamiento cuyas dos terceras partes están dentro del polígono del área natural protegida.

“Esta es la tercera isla de las que están dentro del archipiélago, por eso aquí hay custodios del Bosque de Niebla que son vecinos de aquí (…), de la Fiscalía han venido a medir, nos limitaron y nosotros salimos bien, pero el fraccionamiento sí está invadiendo”, explicó.

Por su parte, Enrique Hugo García Valencia integrante del grupo Custodios del Archipiélago Xalapa, alertó que en la zona hay distintas especies de animales que están en peligro de extinción y que fueron afectadas con la construcción de las viviendas.

Explicó que en la zona habitan unas 20 familias en viviendas que están bien constituidas y fuera de los márgenes del área protegida.

En ese sentido, subrayó que es un hecho que el ayuntamiento a cargo de Américo Zúñiga Martínez otorgó los permisos después de que se hizo el decreto de protección del área natural protegida.

“Luego de que comenzaron a edificar la respuesta de PROFEPA ante nuestra inconformidad es que los inmuebles se hicieron en un bosque de café, lo que es una absoluta mentira porque talaron decenas de árboles centenarios”, lamentó García Valencia.

(Agencia Imagen del Golfo)