La potencial y desaprovechada situación económica y política del sureste de Veracruz es vieja y muy debatida. La idea de llevar capitales nacionales y extranjeros para su desarrollo como en el norte, centro del país y la península de Yucatán; ha sucumbido ante la defensa de la cultura regional, la soberanía indígena y el daño a los recursos naturales por el “ofensivo” capital. Mientras, el atraso ahí sigue, en pleno siglo XXI, como “irracional homenaje” a la pobreza en contraste con la mayor riqueza en recursos naturales del país y ubicación estratégica para el comercio internacional.  Añejo es el proyecto del gran Canal del Istmo de Tehuantepec, y líneas modernas de Ferrocarril  para unir el Océano Pacífico y el Atlántico –detonante, no solo del Sur de Veracruz sino de México-, cuyo debate debería afinarse y actualizarse por el bien de los millones de veracruzanos y de México. El Canal acortaría distancias, agilizaría el comercio internacional y acabaría con las desigualdades y pobreza de millones de mexicanos de esta zona. Ojalá se retomara el tema, es una solución viable…Es la opinión que ofrece el economista Ricardo Olivares, en su Real Politik