Los cabilderos de los tres grupos políticos de Veracruz que buscaban afanosamente colocar sus piezas en la Presidencia del CDE del PRI, han fallado. El vaso se derramó cuando los niños de la fidelidad no aceptaron que un representante del Senador Héctor Yunes Landa, u otro del Senador Pepe Yunes Zorrilla, ocuparan la presidencia de CDE… para ellos es todo o nada.
Nuestros fuentes en el Altiplano, que es donde las arañas tejen realmente su nido, nos comentan que Manlio Fabio Beltrones y Héctor Yunes Landa, impulsaban Jorge Moreno Salinas; que Pepe Yunes Zorrilla a una priísta cuyo nombre no fue revelado; y que Fidel Herrera, Pepe Murat, y los niños fieles, a Silvio Lagos Galindo o a Jorge Carvallo.
Se nos ha informado que como cuarto en discordia -definido así por ser quién tiene un perfil ajeno a los tres grupos políticos mencionados- estaba el actual delegado del ISSSTE, Renato Alarcón Guevara. El cual sí era aceptado por uno de los grupos, pero rechazado a morir por los otros dos. Lo anterior provocó acaloradas y ríspidas discusiones en la Ciudad de México rayando en un zafarrancho político jarocho.
Así que quietos todos y cosa curiosa, muchos priístas que ni siquiera se han mencionado hasta la fecha, estarán esperndo la buena circunstancia. Abierto el abanico.
Por tal motivo, Enrique Ochoa Reza, líder nacional del PRI, cerró su maletín y despidió a los cabilderos de Manlio y Héctor, de Fidel Herrera y Pepe Murat; y a los de Pepe, y les dijo que estuvieran atentos a lo que decidieran en Los Pinos.
Quien esto escribe consultó con diversas fuentes de Gobernación, y nos informaron que todos los sectores adheridos al PRI en el Centro de la República están muy sorprendidos y preocupados por lo que llaman ya el “Caso Veracruz”. Movimiento Territorial, CTM, CNC, CNOP, Mujeres, Jóvenes y demás órganos del partido, han propuesto que antes de elegir a su Presidente estatal, se realice un diagnóstico y se planteen las rutas críticas políticas de cómo podrán lograr el triunfo en las próximas elecciones: en las municipales y en la estatal del 2018. Lo anterior para que posteriormente a esa especie de catarsis partidista, se haga como ya se ha hecho en otros estados (concretamente en el Estado de México), en el que ayer se tomó esta misma decisión y de tajo frenaron el destape que algunos grupos tenían planeado en favor de Alfredo del Mazo Maza, lo que generó que este jueves ninguno de los acelerados diera declaración alguna. ¡Todos quietos! El manotazo vino de Los Pinos.
El método consistirá en que una persona cercana al Presidente Enrique Peña Nieto se apersone en todo el proceso para analizar desde el diagnótico de porqué se perdió en junio hasta el análisis de los perfiles de los aspirantes a ocupar la Presidencia del CDE y que verifique:
1. Que sean neutrales a los tres grupos mencionados.
2. Que no aspire a ser candidato a Gobernador en el 2018.
3. Que tenga buena imagen. (Necesitarán la Lámpara de Diógenes)
4. Que haya ganado elecciones.
5. Que haya estado en el Poder Ejecutivo estatal o federal.
6. Y que tenga experiencia legislativa.
Una vez analizados los perfiles de los aspirantes, en Los Pinos se dcidirá el nombre. Así, el próximo Presidente del CDE tendrá todo el apoyo.
Ese podría ser en primer término el camino en adelante para resolver el “Caso Veracruz”.
Por otra parte, se nos confió que Regina Vázquez Saut, Secretaria general del CDE del PRI, no se moverá hasta que la Delegada General del Partido, Lorena Martínez Rodríguez, le indique el procedimiento autorizado desde Los Pinos. REcuerde bien esta fecha, 17 de enero.
La cosa está que arde, y el tiempo de auscultación, aceleración, planchado y retocado para definir los candidatos a las alcaldías se agota y si me apuran ya se les agotó. Por ello, lo más probable es que el proceso municipal se arme a la “pela vaca” y todos los preparativos que hagan los tres grupos políticos, juntos, amarraditos y en completa disciplina hacia Los Pinos, sean con miras al 2018… aunque a ver si todavía les da tiempo. |