Para muchos pasó desapercibido, pero este martes que el diputado local José Luis Enríquez Ambell tomó protesta en sustitución de Gerardo Buganza, la bancada priista hizo de las suyas. 

Se sabe que hay molestia porque Ambell se adhirió al grupo del PAN, por lo que los priistas decidieron hacerle una travesura de bienvenida. 

La intención era hacerlo quedar en ridículo: una vez que se parara frente al Pleno y tomara protesta formal, se tendría que dirigir a su curul, que es la que ocupaba Buganza y que físicamente está frente a la bancada de MORENA y la del PRI. ¡Ah! Pero como estos son ladinos, literalmente quitaron y escondieron la curul (la silla) para que el nuevo diputado no tuviera dónde sentarse e hiciera el ridículo. 

Con lo que no contaban es que la curul de la Presidenta Mariely Manterola ha permanecido desocupada por lo que Enríquez Ambell sencillamente se sentó en su silla de la fracción panista, allanando así su adhesión. 

Armaron tanto lío que hasta el diputado Sergio Rodríguez comentó que Eva Cadena había realizado su último hurto y ella se había llevado la silla… pero no, fuentes legislativas aseguran que fueron los priistas, quienes ya están acostumbrados a eso de la uña.

Entre gitanos te veas.