Mucho más cuidado deberían tener los que auxilian a los candidatos, sobre todo porque la crítica de ninguna forma se dirige a ellos, sino al candidato mismo.

Es obvio que Fernando Yunes Márquez no se la pasa subiendo las cosas al Facebook o al Twitter, pero la calidad de las personas que tiene para ayudarlos es la misma que pretende llevarse a la alcaldía de Veracruz Puerto en caso de ganar.

Y es que Fernando quedó en completo ridículo cuando subió en redes un promocional suyo con la leyenda “A Veracruz ¡Ya le toca!”, al que le añaden la leyenda “Un centro histórico más ordenado”.

El problema es que, caray, no es posible, utilizaron una fotografía de la Iglesia de la Virgen de la Candelaria de Tlacotalpan.

Después, cuando se dieron cuenta de su error, dijeron que el promocional fue desvirtuado por sus enemigos políticos, pero el gazapo ahí quedó.

¡Aguas!