Las declaraciones de Rex Tillerson, Secretario de Estado de USA, enuncian oficialmente la relación entre los cárteles mexicanos de la droga con terroristas islámicos, en particular el denominado ISIS. 

Más allá de una conjetura simple o una continuidad de la post verdad, el aserto de Tillerson anuncia abiertamente la relación que USA tendrá con México para fines de seguridad. 

Que nadie se llame a engaño del futuro de fuerza de USA sobre México y la sumisión que corre el riesgo de asumir nuestro país. 

Un futuro de cooperación o de vasallaje le espera al país ante la autocomplacencia interna y externa que ha tenido México por al menos los últimos seis lustros. 

Nuevas acciones y tareas habrá de desempeñar México para garantizar la seguridad de USA, como ya se pretende hacer con Centroamérica; pero también nuevas acciones y tareas deberá emprender para garantizar nuestra propia seguridad frente a USA. 

La historia inmediata del Medio Oriente, especialmente Irak y otros países de esa región así lo atestiguan, como también nuestra historia de la segunda parte del siglo XIX lo evidencia. 

Mientras, seguiremos parroquialmente perdidos en nuestros afanes de celebridades y en busca de la alternancia del poder de depredar cómo leit motiv de nuestro ser nacional. 

Que el tiempo nos guarde de nuestros salvadores.