Este miércoles hubo tres contactos que hablan de ello. 

1. Yunes Linares habló de “desarrollo y esperanza”, privilegiando un poco lo positivo de Veracruz, sobre el mensaje de encono y fuego anterior.

2. El Secretario de Gobierno, Rogelio Franco Castán, declaró que en Veracruz todo está normal y tranquilo.

Y 3. Joaquín Rosendo Guzmán Avilés, titular de SEDARPA, buscó tranquilizar a los ganaderos del Estado hablando de apoyos para solventar la sequía que les agobia.

Ahora bien, se preguntará qué tiene de bueno lo de Franco o Guzmán Avilés, sobre todo considerando las duras y ácidas críticas que recibió Rogelio en las redes sociales. 

La respuesta es sencilla: la labor de todo Secretario es absorber su propia responsabilidad, que hasta ayer, sin excepción, les cargaba el Gobernador.

El Gobierno está en su papel al decir que todo está tranquilo, o decir que en educación todo va bien, o infraestructura, o desarrollo social… pero igual un buen Gobernador debe ser ecuánime y no estar en la primera línea de fuego, y si se equivoca su gente, entonces sí entrar a sacar el pecho. 

¿Será que ya lo hayan entendido? ¿O esto será flor de un día?