Una cosa es que toooooooodos sepamos que en MORENA no hay más que AMLO y otra muy distinta restregarlo en la cara.

Muy mal se vio Yeidckol Polevnsky al afirmar que si alguien desea contender contra López Obrador por la candidatura sería bienvenido, pero afirmar “Bienvenido quien quiera anotarse, yo quiero ver qué loco se quiere anotar a competir contra Andrés Manuel”, es reudeza innecesaria.

Pero AMLO también la regó al intentar echarse a la bolsa al empresario Lino Korrodi de quien dijo que “no se vale que por un error, toda la vida esté marginado” (Korrodi apoyó a Fox).

Sólo que Korrodi se cuece aparte y no está dispuesto a dejarse ningunear y ya aseguró que aunque respeta el tratamiento que le dio AMLO, no lo comparte, y advirtió que su relación con López Obrador “apenas está en ciernes”.

¡Aguas! No vaya siendo que entre los Morenistas les aparezca algún gallo democratizador, o que los empresarios se sientan minimizados y utilizados.