Después de 4 meses y 3 días de que se anunció que se iba a  reestructurar la deuda pública del gobierno del estado de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares (Mayuli), gobernador del estado, reconoció de manera explícita que hasta ahora nada ha logrado.

Y eso que informó con bombo y platillo que en este año reestructuraría la deuda pública de la entidad para bajar el llamado "servicio de la deuda", o sea, los intereses que se pagan por la misma.

Ante este … (llamémosle “inconveniente”, para no usar el término de fracaso) inconveniente Mayuli ahora busca nuevas formas de lograr la reestructura.

Y para ellos presentó a la Cámara de Diputados local el 25 de julio una propuesta para constituir "Fideicomisos Públicos Acreditables", una figura que se publicó el 30 de junio que permite crear fideicomisos públicos sin estructura, que puedan actuar como sujetos acreditables para recibir los financiamientos autorizados en favor del Estado o del municipio correspondiente.

Tardó casi un mes en reaccionar entre el anuncio y la aprobación de la figura y el presentar la solicitud para que se la aprueben en lo local.

¿Porqué tanto tiempo?.

Este “Fideicomiso” significa que el préstamo ya no será para los gobiernos de los estados, si no para el fideicomiso que se constituya.

Un ejemplo: Usted está endeudado en demasía con uno o varios bancos; su capacidad financiera está rebasada, pero llega alguien y le propone que para que usted pueda tener un nuevo crédito para reestructurar todo, debe crear un fideicomiso, con la totalidad de sus ingresos, para garantizar el pago del nuevo préstamo.

Es decir, le embargan su sueldo.

Y eso es lo que ocurrirá en términos prácticos con las participaciones del gobierno del estado: serán embargadas.

El mismo Mayuli lo reconoció: todas las participaciones irán directo al Fideicomiso.

Usted debe el 45% de su sueldo de un año (ese es el porcentaje de la deuda del gobierno del estado de Veracruz)

Le hacen cuentas y le dicen que ahora ya no pagará 5 pesos de cada 100 de sus ingresos, si no que después de la reestructura cubrirá sólo 3 pesos o 3.50, por cada 100 pesos de ingreso que tenga, pero que el plazo será de 30 años y que si se muere, la deuda se le queda a sus hijos y a sus nietos y a toda su descendencia identificable, porque no hay ni perdón ni olvido.

Bueno, 3.50 pesos por cada 100 de ingresos, no es mucho. Se oye manejable.

Sólo que existe un detalle, entre el pago de la casa, el automóvil, las colegiaturas de los hijos, el gas, la luz, los teléfonos celulares de toda la familia, el internet más caro, gasolina y otros, a usted sólo le quedan 5 pesos libres, de donde se deberán tomar 3.50 pesos.

Ante esto, su panorama sería reducir el gasto, para tener un poco más de dinero libre para darle mantenimiento y servicio a la casa, así como para que cada miembro de la familia tenga algo de liquidez.

Y hace los recortes, y en estos también disminuye el dinero para gasto que se le da a los hijos, reduce los costos de planes de teléfono, cambia de escuela a los niños, disminuye el plan de pago de la televisión y otras cosas más.

Ahora ya tiene 10 pesos por cada 100 para gasto directo, incluyendo lo de la deuda.

Pero en lugar de comprar equipos y utensilios para la casa, servicios médicos para algún familiar, libros o accesorios educativos, usted toma 6 pesos de esos 10, dejando lo demás para el pago de la deuda, y los utiliza en usted.

Así, usted trae un celular caro con un plan caro, el automóvil de lujo, gastos en restaurantes caros, salidas a pasear y hasta vacaciones, todo con el cuento de que usted tiene que verse bien porque tiene trato con otras personas.

Y así llegamos al caso de Veracruz, que tiene un gobierno con un gasto excesivo (porque los funcionarios de gobierno del estado siguen igual que siempre), y muy bajas inversiones en obra pública, salud. Pero eso sí, cada vez que hace algo o que promete cualquier cosa, o que le llega una prestación, lo anuncia como una gran cosa, como una promesa que resolverá todo o como un gran logro que tuvo y espera que todos le aplaudan y lo feliciten.

Eso es lo que Miguel Ángel Yunes está haciendo con su reestructura de la deuda, que hasta ahora no ha podido lograr porque los bancos no le tienen confianza.

Ahora el fideicomiso que se propone tendrá vigilancia de Banobras, para garantizar su buen manejo, para además ese órgano estará obligado a la transparencia y rendición de cuentas.

Es decir, la Secretaría de Hacienda buscó la forma de amarrarle las manos a Mayuli y todos los gobernadores que están buscando la forma de endeudar más a los estados.

Pero de todos modos Yunes Linares sigue buscando la manera de que la reestructura de la deuda sea un negocio que brinde un buen dividendo. Y si es posible, los 1,150 millones que estaban proyectados en un inicio.

Mayuli no han perdido la intención de tener un intermediario financiero para la reestructura de la deuda, al cual se le pagará -obviamente- una comisión por la reestructura; vaya, la proyección es de un 2.5% sobre los montos financiados para los intermediarios financieros, por lo menos.

Tan esto es así, que se resiste a crear la Unidad Administrativa de Registro Único de Deuda, que también está promoviendo la SHCP.

Desde que se firmó el decreto del 21 de marzo para la reestructuración financiera se mencionó que las operaciones por parte del gobierno del estado las llevaría Jesús Villalobos López, quien fue secretario de finanzas en el ISSSTE, con Miguel Ángel Yunes –precisamente- y luego el director suplente.

Jesús Villalobos tiene el oscuro antecedente de que en la Lotería Nacional, implementó un fraude por el cual se aparentó que 11 trabajadores de esa dependencia se ganaron un premio de casi 90 millones de pesos.

El notario que se había mencionado para llevar las operaciones de la reestructura de la deuda es Leopoldo Domínguez Armengual, el ineficiente Secretario de Turismo del gobierno de Yunes Linares.

Nada más por esto es necesario transparentar el proceso de reestructuración de la deuda.

Mayuli tampoco está cuidando que tiene un gran adeudo con los ayuntamientos del estado, muchos de los cuales viven apreturas económicas, porque los bancos, no les quieren prestar, aun cuando les autorizaron adquirir crédito.

Quieren seguir el mismo esquema, de "primero te embargo las participaciones, luego garantizo que me pagues, y después te doy el préstamo".

MAYL ya endeudó en 3,000 millones de pesos más al estado. Por mientras la deuda del gobierno del estado de Veracruz ya creció en 3 mil millones de pesos durante el primer trimestre de Miguel Ángel Yunes.

Mayuli el 23 de enero de 2017 solicitó autorización para reestructurar 42 mil millones de pesos de deuda bancaria del gobierno del estado.

Ahora la deuda pública abierta del gobierno del estado es de 45,064 millones de pesos; es decir, Miguel Ángel incrementó los pasivos en 3,000 millones de pesos en un trimestre.

Pero ese no es el monto que piensa dejar como herencia a los veracruzanos, si no que será una cantidad mucho mayor.

¿Cuánto?.

Está por verse.

Pero ésta es otra promesa hecha a los terrenales que Mayuli no ha cumplido: Ya no endeudar más al estado y bajar el monto de la deuda.