En el peor momento el PAN se parte en dos o en tres por la candidatura hacia Los Pinos. Ayer en el Senado cayeron caretas en un singualar espectáculo.

En pelea callejera los contras de Ricardo Anaya tumbaron a las senadoras Laura Rojas y Adriana Silva, propuestas por el dirigente azul para presidir la Mesa Directiva en los próximos dos periodos ordinarios de sesiones e impusieron a Ernesto Cordero.

Los senadores Ernesto Herrera, Jorge Luis preciado y Gustavo Madero, les gritaron “traidores”, “esquiroles”, “tapaderas” a Ernesto Cordero, Javier Lozano, Jorge Luis Lavalle Maury, Roberto Gil Zuarth y Mariana Gómez del Campo, coincidentemente calderonistas e impulsores de Margarita Zavala.

La incoherencia es que rumbo a Los Pinos el PAN busca un Frente Amplio, cuando al interior hoy, están despedazados y está claro que estos mismos "traidores" apoyarán Raúl Cervantes Andrade, para llegar a se el Fiscal General de la Nación.