El ex gobernador Javier Duarte de Ochoa, así como el ex secretario de Salud, Pablo Anaya Rivera, tuvieron en todo momento conocimiento de la existencia de medicamentos clonados o falsos, señaló categórico el ex contralor general, Iván López Fernández, tras comparecer ante la Fiscalía General del Estado (FGE), por la investigación que se instruye en ese tema.

López Fernández explicó que desde el momento que él tuvo conocimiento de la existencia de dichos medicamentos, se aseguró, de manera inicial, que estos fueran los correctos, de acuerdo con las instrucciones que le fueron giradas, incautando algunas bodegas, tomando muestras y certificando las medicinas.

Sin embargo, afirmó que el documento suscrito el 1 de septiembre de 2010 por el laboratorio “Roche”, en el que indica que el activo –inexistente- del medicamento Avastin no correspondía a dicha firma, le fue entregado hasta el 5 de abril de 2011.

Señaló que los medicamentos que su gestión encontró con irregularidades no fueron suministrados a ningún paciente, sin embargo debido a la presión que se ejerció por parte de familiares de los enfermos para indagar, la investigación continuó.

El ex contralor enfatizó que él responde por los hechos concretos a su paso por la Contraloría, que incluye el conocimiento pleno de Duarte de Ochoa de lo que estaba sucediendo.

López Fernández expresó que sí hubo inhabilitaciones y sanciones, pero prefirió no mencionar los nombres de los implicados, aunque dijo que se esperará a los términos legales establecidos por la propia fiscalía para darlos a conocer.

“Para no dar un dato erróneo, no me interesa perjudicar a nadie”, sostuv