El Presidente Peña, quizá fastidiado, dijo ayer en el Foro Impulsando a México: “Si hay un choque acá en la esquina… ahhh, fue la corrupción”.

“Algo pasó con el semáforo. ¿Quién compró el semáforo que no funcionaba? Ehhhhh…”

“¿Los socavones? Pues, a ver, pasa en todas partes del mundo. Uno señalado. Pero ha habido más”.

“Y ahora vimos estos sismos. Y detrás de cada evento quieren encontrar un responsable, un culpable, y siempre decir ‘es la corrupción’, cuando no siempre asiste el que detrás de un evento, consecuencia de algo, tenga que ver la corrupción”.

“Cuando un agente de tránsito te detiene por una falta vial y no traes tu licencia de conducir y quieres evitar la multa dándole dinero, ¿a quién culpar, a quien no traía un documento y cometió una falta o al funcionario público que está dispuesto a recibir un soborno?”.

Puede ser, pero la mula no era arisca señor Presidente.