La que será Secretaria de Gobernación con Andrés Manuel López Obrador, la ministra en retiro Olga Sánchez Cordero, dio para El Universal una reveladora entrevista. 

No dijo nada (por cierto) que no se supiera, y tal vez en eso recae lo desgarrador del asunto, porque la violencia se ha institucionalizado; porque las noticias de desaparecidos, torturados, embolsados y descuartizados se ha convertido en algo ‘normal’ 

¿Y cómo no? Después de 200 mil muertos y más de 40 mil desaparecidos cualquiera pierde la capacidad de asombro. Ver a niños de 10 años halconeando o jovencitos de 14 como sicarios es ya solo una simple curiosidad.

En realidad, como bien apunta Sánchez Cordero, estamos “perdiendo una generación de jóvenes, ya sea por desapariciones o porque ya están dentro del crimen”.

La Pacificación del país es urgente y si las fórmulas que se utilizan hoy día no funcionan es necesario abrir el diálogo a otras.

Los debates por la despenalización de las drogas o la no criminalización de los jovencitos inmersos en el crimen, se deben abrir y tomar con toda seriedad.

Urge que México deje de ser el enorme cementerio nacional en que ha sido convertido.