La reciente visita de Peña Nieto a la Naval de Antón Lizardo pudiera ser la última que realice a Veracruz a pesar de prometer venir al menos una vez más a inaugurar la 1a etapa de la ampliación del Puerto de Veracruz, así como la 2a etapa de la súper carretera Cardel-Poza Rica.

“Son de los últimos compromisos por cumplir de su campaña presidencial y lo vamos a cumplir, ya casi se terminan esas dos obras”, dijo en su momento Ruiz Esparza a Política al Día.

¿Pero qué sucede? Que por el momento no se puede inaugurar el compromiso presidencial de la 2a etapa Cardel-Poza Rica porque un pequeño grupo de pobladores de la comunidad Felipe Carrillo Puerto, conocida también como Paso Largo, han tomado la caseta de cobro del tramo que falta por inaugurar, por una supuesta afectación provocada porque en lugar de un puente elevado se construyó un talud de arena que, dicen, les inundará sus tierras. 

En Veracruz al parecer, como ya pasaron las elecciones, se acabó la cero tolerancia por parte de Yunes Linares a las tomas de carretera y mientras aquí no desalojen el tramo pues no se terminará la obra.

A menos que el acuerdo sea no permitir que Peña Nieto inaugure ese compromiso presidencial para que esas dos obras sean las primeras que inauguren López Obrador y Cuitláhuac.