Se sabe que en breve habrá una reunión de la Corriente Crítica con Américo Zúñiga, la cual seguramente será provechosa en el ánimo de reconstruir al Partido.

Hay confirmación de que los verdaderos priístas, los que siempre están al pendiente de las acciones del CDE del PRI, están contentos y satisfechos con el trabajo de la Contraloría Interna del partido y con Américo, pues gracias a que se pusieron las pilas evitaron multas excesivas en este proceso electoral, a diferencia de los anteriores.

Así que con todo y penurias, en el PRI no todo está perdido y si se van los malos elementos (como pidió Ramos Vacarte, Presidente de la Comisión Estatal de Ética Partidaria) todavía hay partido para rato.

Por cierto, ahora que están de moda los Challenge en redes sociales, entre broma y broma dicen que hay dos sectores que quieren disputarse la supremacía y corren apuestas para ver quién gana: los ex dirigentes juveniles o la Corriente Crítica.

Dicen los chavos que si los de la Corriente aguantan sin dormirse un discurso de Inocencio Yáñez les ceden la Presidencia del PRI… y si los jóvenes aguantan un discurso de Ulises Ruiz sin reírse, se la quedan ellos. ¿A quién le va?