Por si andaban con el pendiente de qué iban a hacer los nuevos senadores con el superbono de $392 mil que le tocaría a cada uno, destinados a iniciar su trabajo legislativo, les podemos decir que los senadores si saben contar, no cuenten con ese bono.

Y es que los apoyos que desde el 2006 recibían los senadores correspondientes a “Apoyo para el trabajo Legislativo y de Gestión” ($250 mil), “Apoyo para la Modernización Tecnológica” ($25 mil) y “Asignación Especial por Inicio de Legislatura” ($117 mil) (un auto, computadora y menudencias, respectivamente), estarán considerados dentro de un plan de austeridad que han proyectado los senadores de Morena para eliminar privilegios y excesos.

Lo complicado para algunos es que estaban contando cuando menos con la flotilla ya existente y que habían dejado de herencia los senadores salientes, pero ¿Qué cree? Resulta que hasta de eso se tendrán que abstener, pues el coordinador del Grupo Parlamentario de Morena, Ricardo Monreal, dijo que, “como parte del proceso de austeridad, toda la flotilla de automóviles del Senado de la República en la anterior legislatura serán subastados conforme a la Ley”.

Así las cosas, ahora sí que o traen sus propios vehículos o comenzaremos a verlos llegando al Senado en el Metrobús.