Si hay un empresario que fue artífice de la mala reputación de Enrique Peña Nieto, ese es Claudio X González.

Desde el inicio de la administración las diferencias entre ellos fueron notorias y un amplio sector de empresarios le soplaron lo que más pudieron a las llamas del antisistema para potencializar en enojo contra la corrupción y los desaciertos del gobierno peñista.

Por eso, el que Claudio salga a enmendarle la plana a López Obrador, debería considerarse algo serio.

El Presidente Electo fue demasiado “audaz” al afirmar que el país está en “Bancarrota”, pues esta declaración más allá de ser alarmista podría poner en serios aprietos la economía del país reaccionando negativamente en la Bolsa Mexicana de Valores y en las calificadoras internacionales.

Por supuesto que -como asegura Claudio- “esas afirmaciones no ayudan” pues las inversiones necesitan un ambiente seguro, así como también es un hecho innegable que López Obrador haya querido “matizar” lo difícil que será poder cumplir con las inagotables demandas de la sociedad. 

El ponerse el curita antes de la cortada es algo que muchos hacen: lo hizo Yunes Linares en Veracruz y lo hace Cuitláhuac García cada que puede.

López Obrador podrá decir misa, pero los números definitivamente no señalan en dónde está la famosa “bancarrota”. Por lo pronto, Claudio X González Laporte le ha puesto el primer coscorrón y si AMLO no se aplica, la relación con los empresarios podría ser también su talón de Aquiles como lo fue de Peña Nieto.