Ahora que ya puede hablar Andrés Manuel López Obrador con relación al aeropuerto en Texcoco o Santa Lucía, confirma vía redes sociales que todo fue por un problema de corrupción.

Del tema de impacto ambiental, los problemas técnicos o el sentir de los vecinos de Texcoco o Santa Lucía no dijo nada, el chiste era quitarles el negociado de sus vidas a unos cuantos.

¡Bravo! Se aplaude porque de verdad que “el pueblo se cansa de tanta pinche tranza”, el problema es haber arriesgado en una Consulta una decisión que debe tomarse a mano pelona para evitar más saqueos.

¿Qué hubiera pasado si ganaba Texcoco? Pues con la filosofía de AMLO entonces se hubiera realizado el atraco a la nación, “y con la complacencia del pueblo”.

Vía redes afirma que incluso pudo ver el proyecto con el que en las 600 hectáreas del actual aeropuerto en la CDMX se construiría un desarrollo inmobiliario que catalogó como otro “Santa Fe”.

Pidió serenidad y que haya tranquilidad entre la gente.

Bien, muy bien, qué bueno que no se permitió ese robo, pero realmente no era necesario entonces una Consulta para impedirlo, bastaba con que a partir del 1 de diciembre fincara responsabilidades, cancelara la construcción del nuevo Santa Fe y que terminara de construir el aeropuerto en Texcoco ya limpiecito de corrupción.