En la política las prohibiciones siempres son ‘chocosas’, a nadie le gusta que le pongan trabas, pero a veces son necesarias. 

Por ejemplo, alguien debería poner frenos a la declaracionitis irresponsable, de cualquier nivel, pero sobre todo a legisladores.

Al menos en los casos de los legisladores que, buscando sus cinco minutos de fama, salen a declarar cualquier sandez que se les ocurre. 

Dos declaraciones irresponsables, surgidas de simples iniciativas personales sin que hubieran pasado al menos por la aprobación de las correspondientes comisiones legislativas, han causado dos estrepitosas caídas de la Bolsa Mexicana de Valores. 

La primera con la famosa eliminación de las comisiones bancarias que presentó en el Senado el líder de la bancada de Morena Ricardo Monreal y la segunda -que motivó otra caída, la peor en los últimos cinco años- producto de un desvarío del Partido del Trabajo al proponer que México regrese a un sistema de Pensiones único, lo que eliminaría empresas tan poderosas como las AFORES. 

Una tremenda vacilada que ni siquiera ha sido discutida por los partidos políticos en la Comisión legislativa competente, esto es, es una simple idea de un legislador y partido trasnochado.

Habría que saber que los inversionistas mueven su dinero no ante hechos consumados sino ante simples expectativas, estos inversionistas apenas oyen que el río suena, saben que agua lleva, así se trate de simples ideas trasnochadas como la que propuso el PT. 

Por lo pronto ya hicieron perder millones de pesos a los bancos, luego a las Afores… ¿Qué sigue?