En cada cambio de gobierno es normal que haya movimientos de personal, pero aunque es normal, esto no quiere decir que sea correcto. Los empleados, aunque sea de “Confianza” tienen derechos a no ser despedidos sin justificación y si son despedidos a recibir su liquidación conforme a la Ley.

En varias oficinas, sin embargo, a poco más de una semana del ingreso de Cuitláhuac, continúan aflorando las quejas, como es el caso del Instituto Superior de Música perteneciente a la Secretaría de Educación de Veracruz.

Allí, trabajadores denuncian un sinnúmero de atropellos por lo que han llamado un “despido masivo” de académicos, personal administrativo y comisionados de Base que tienen plazas definitivas realizando labores administrativos desde hace ya varios años. 

Señalan directamente a la nueva Directora, Citlalli Guevara del Ángel, quien a la fecha no ha recibido a ninguno de los trabajadores desplazados para escuchar razones y a todos los deriva a Recursos Humanos.

En total, 32 maestros de la plantilla académica se quejan contra esta Institución ya que desde hace dos años el gobierno Yunista no les autorizó firmar sus respectivos contratos, aunque ellos aseguran haber continuado laborando “de buena fe” para no perjudicar al alumnado.

Pero ahora, les han retirado el reloj checador para que no justifiquen su asistencia y así darlos de baja más fácilmente.

El problema en el ISMEV es que al parecer un familiar del gobernador es quien está metiendo mano, pues los trabajadores señalan a Tonatiuh García y que él habría colocado allí a Citlalli; así como a Ross Thomas Ipsen, Director de Orquesta, estadounidense de Wisconsin; además del panameño Samuel Robles Arenas como subdirector Académico; y al subdirector Héctor Díaz Martínez, del grupo musical Élite.

En general, los trabajadores aseguran que estos son problemas que se podrían arreglar con la voluntad del Secretario de la SEV, Zenyazen Escobar, pero que sencillamente él no quiere meter las manos por la influencia del familiar del gobernador en el ISMEV.