El PRI estatal se prepara para lanzar el día de mañana la convocatoria para la reestructuración de su Consejo Político Estatal, el cual -como ya estará enterado- será un mini Consejo debido a la reducción de 600 a 400 integrantes. El total de consejeros estarán compuestos por 200 representantes territoriales y otros 200 de los Sectores y organizaciones. 

Esa situación ha sido duramente cuestionada porque, se comenta en los cafés, en cierta forma denota debilidad política, precisamente cuando lo que le hace falta al partido es la mayor membresía posible. 

Sin embargo, el próximo Consejo tiene un importante atractivo y es que desde el CEN del PRI se ha dado la instrucción de que sea ahí donde se decida el nombre del próximo Presidente del Comité Directivo Estatal. 

Al menos eso es lo que se le ha oído afirmar al flamante delegado nacional del CEN Hugo Contreras Zepeda, quien sostiene que en la democracia partidista no se deben dejar las decisiones importantes al juego de la oferta y la demanda. Por ello se afirma que Lillian Zepahua ya recibió el sobre con la lista de los 400 integrantes sin derecho a cambios. Desde luego, del partido podrán desmentir lo anterior pero la decisión ya está tomada… dejaría de ser el PRI si no fuera así. 

Por otro lado, fuentes bien enteradas manejan que ya está definido quién será el nuevo dirigente estatal y que saldrá entre los siguientes nombres: Marlon Ramírez Marín, Tomás Carrillo Sánchez, Antonio Benítez Lucho, Juan Carlos Molina Palacios, Erika Ayala, Guadalupe Porras David o Zaida Lladó. 

Un dato que se maneja en firme pero muy en secreto, es que Fidel Herrera y el güero Velasco de Chiapas ya tienen su gallo.  Saque usted la conclusión, quién de los antes nombrados ha estado más cerca del cuenqueño.