Vaya, vaya con el ahora exdirigente estatal del PRD Sergio Rodríguez Cortés, quien haciéndose el interesante mandó a los medios de comunicación y la opinión pública su “Carta de renuncia al PRD”. 

Sergio afirma que con esta fecha (24 de enero del 2019) decide dar por terminada su afiliación partidista al PRD que adquirió desde 1992. 

En una extensa carta que parece una bonita plañidera de lágrimas, esgrime todo lo que hizo por el partido, sus logros y sus batallas, como las que realizó contra Fidel Herrera Beltrán, Vicente Fox, Javier Duarte y Miguel Ángel Yunes Linares. 

Asegura que con la Sentencia de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación SUP-JDC-568/2018 del día 9 de enero de 2019, por unanimidad los señores magistrados dejaron sin efecto la resolución de la Comisión Nacional Jurisdiccional del PRD y le regresaron su militancia… la cual, con dicha carta, les vuelve a tirar y al líder estatal del PRD, Jesús Velázquez Flores le dice: “le vuelvo a restregar en su cara con esta resolución que es un CENUTRIO”.

De acuerdo con el diccionario la palabra cenutrio también tiene como sinónimos “torpe, desmañado, estúpido, zoquete, berzotas, bruto”. O sea, no se la mandó a decir.

Al interior del PRD comentan que sólo son ganas de hacerse el interesante, pues desde inicios de noviembre del 2018 ya lo habían expulsado y para efectos prácticos él ya no era perredista. 

Esta carta, por cierto, es harto innecesaria, pues desde que campechanamente se sentó en la silla de la PROEPA (Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente) todos sabían de qué color ya latía su corazón. 

En fin, Sergio dice estar “agradecido con la vida tan maravillosa que me ha enseñado a tomar desiciones. Estoy orgulloso de pertenecer al equipo político del Gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez, un hombre de buena voluntad que cambiará la forma de ver y hacer política”.

¡Qué bonito es estar en el Gobierno! En verdad que vivir fuera del presupuesto es vivir en el error y este Sergio bien que sabe vender caro su amor.