Qué bien que se haya corregido el error de poner topes en la carretera Xalapa-Veracruz a la altura de Plaza Xanat. Aquellos que aplaudieron la medida seguramente no consideraron todos los ángulos posibles del problema (que eran muchos), pero afortunadamente se dio marcha atrás y ya los quitaron. 

Queda, sin embargo, el problema del semáforo que se colocó en esa misma zona. Al respecto hay pros y contras, pero también hay varias opciones disponibles: la mala y barata; la regular y poco costosa; y la ideal pero costosa.

La mala y barata es quitar el retorno (que ni siquiera es retorno, sino un acceso a Las Trancas) y hacer que todos vayan hasta el trébol de plaza Américas para dar la vuelta. O en su defecto, que sería lo adecuado, que los que ingresan a Las Trancas lo hagan desde el distribuidor de la Central de Abastos. 

La regular y poco costosa es la que se hizo, poner un semáforo pese a la molestia de miles. 

La ideal pero costosa es (si es imprescindible el acceso en el sitio) construir un puente a desnivel. Sólo que esto, obviamente, es algo que en México resulta casi imposible pues aquí estamos acostumbrados a hacer todo al puro bananazo. 

En fin, por el momento quitaron los topes y ya es ganancia.