La Secretaría de Finanzas y Planeación busca la forma de cubrir los adeudos que el Gobierno del Estado tiene con los diversos acreedores desde que el gobierno los dejó colgados con Javier Duarte de Ochoa y que Miguel Ángel Yunes Linares desoyó e ignoró. 

La indolencia con que Yunes Linares actuó y con la que pateó el bote durante los dos años de gobierno fue casi igual de criminal como la inmisericorde falta de voluntad de Javier Duarte y varios de sus colaboradores al no pagarles y mejor robar ese dinero. 

Ahora, lo que se tiene es voluntad pero falta de liquidez, ya que aunque las finanzas estatales han mejorado, aún no se tiene la liquidez necesaria para realizar los pagos, mismos que ya han sido programados y que se afirma serán saldados antes de que termine la presente administración. 

Sin embargo, hay una luz al final del túnel y ésta puede alcanzarse pronto, muy pronto, pues hay buenas noticias por parte de los financieros de SEFIPLAN. 

Se sabe que están a punto de cerrar tratos bancarios para que se formalice un factoraje y los acreedores puedan cobrar el adeudo directamente en el banco… de una buena vez. 

Con lo anterior, el gobierno del estado estaría soportando el adeudo, los acreedores podrían cobrar lo que se les debe ipso facto, se evitarían las nocivas figuras del coyotaje que han intentado hacer su agosto con esas deudas, el gobierno no estaría afectado por la falta de liquidez y, sobre todo, se reactivaría al alicaído sector empresarial que ha pasado las de Caín en los últimos años. 

Se sabe que esta figura mercantil estaría consolidándose en las próximas semanas y los pagos podrían quedar este mismo año.