El Presidente del Comité Coordinador del Sistema Estatal Anticorrupción (SEA), Emilio Cárdenas Escobosa, lo intenta… en verdad lo intenta. Ha expresado una y otra vez -y lo dejó en claro desde el inicio- que él no aspira a brincar a otro puesto, su única aspiración, ha dicho, es terminar bien su encargo. 

Sin embargo, si tuviera más cabello se los mesaría violentamente ante la pasividad y desdén que muestran algunos miembros del SEA. 

“Se está analizando emitir un extrañamiento a la Contralora, Leslie Garibo Puga, pues tiene como dos meses que no acude a las sesiones del SEA. En su lugar envía como suplente a la Contralora del propio SEA, pero la ley no permite suplencias”, asegura Emilio Cárdenas. 

El problema, a decir de Cárdenas Escobosa, es que la propia Contralora “no le entiende al Sistema y hay por tanto un desdén hacia el mismo”. 

El Sistema Estatal Anticorrupción, figura de reciente creación, es un ente que a la ciudadanía en general aún no le queda claro en cuanto a sus alcances y funciones. No tiene los dientes que se esperaría y encima de ello no todos lo toman con la seriedad debida. 

Otro caso es el del Fiscal Anticorrupción, Marcos Even Torres. “Él sí viene, sí acude, pero parece un convidado de palo. Sólo llega, se sienta, y se pone a tomar café y comer galletas, pero no tenemos de él ningún informe de las acciones anticorrupción de su Fiscalía”.