MORENA, como fuerza política sigue siendo un trabuco imparable. MORENA, como aparato gubernamental, comienza a aceitarse y a demostrar vía sendos manotazos en la mesa que sabe operar aunque sea en los bordes de la legalidad. Pero MORENA, como partido político, en su estructura partidista oficial, es un desgarriate, una nulidad, una vacilada.  

Son tantos los líderes naturales de MORENA en Veracruz que el partido está fragmentado y pocos conocen a la estructura oficial conformada por Hugo Alberto Martínez Lino, líder del Comité Ejecutivo Estatal en funciones de presidente, y Gonzalo Vicencio Flores, Secretario General. ¿No los conoce? ¿No había oído hablar de ellos? No se preocupe, en realidad son irrelevantes. 

Ni siquiera los propios morenitas tienen claro aún quién es el presidente. 

La descomposición de la estructura es evidente. Gonzalo Vicencio -cilindreado por el diputado federal Marco Antonio Medina Pérez- se promueve a él mismo como Secretario General en funciones de presidente, mientras que Martínez Lino -sin ningún peso específico- amargamente se queja el no poder quitárselo de encima. 

El lío en MORENA Veracruz es enorme. El partido mismo tuvo que atajar en sus redes oficiales mediante un comunicado de prensa que se trata de confundir a la militancia dándole de “manera apócrifa” a Vicencio el título de Presidente del CEE… pero nadie los peló. 

Entre Gonzalo Vicencio y Medina Pérez fraguan el golpe de estado en el partido aprovechando la falta de atención de Cuitláhuac y el olvido en que ha mantenido a MORENA, pues Cuitláhuac -como si fuera gracia- ha admitido que no se ha sentado a hablar con ningún líder de partido político ni siquiera el suyo propio. 

Medina Pérez, diputado federal plurinominal, es otro caso perdido. Promueve su primer Informe Anual de Actividades Legislativas pero no pasa la prueba del ácido. Escucharlo es más doloroso que tomar con la mano pelona un cable a 220V. 

Medina Pérez medio estudió Economía y gracias a ello funge como Secretario de la Comisión de Hacienda y Crédito Público de la Cámara de Diputados: chico premio para alguien que de Economía no sabe ni con qué se come. Su mayor virtud es repetir los ensalmos de las mañaneras sin un gramo de autocrítica, en el dogmatismo puro y demostrando en una de cada tres palabras el haber dejado trunca la carrera. 

Medina Pérez y Gonzalo Vicencio se mueven en la tenebra Morenista con el desparpajo de quienes se saben no estar vigilados. El propio Gonzalo Vicencio con una desfachatez abrumadora asegura que no está trabajando por un cargo sino por el seguimiento de la Cuarta Transformación. ¡Vaya cachaza! Si en realidad eso fuera se abstendría de presentarse con una función que no tiene. 

MORENA actúa como si todo estuviera ya ganado. Saben de su fuerza política, saben que tienen los congresos y el Ejecutivo, saben que varios de sus políticos están creciendo como figuras y por eso, en la ostentosa soberbia, se han dado el lujo de olvidar la casa y poner orden. 

MORENA en Veracruz podrá ganar todo, es más, lo más seguro es que lo hagan, pero corren el riesgo gigantesco de ahogarse en el poder que corrompe. 

Como dijo Porfirio Muñoz Ledo: se puede tener el poder y no pasar a la historia, y se puede pasar a la historia sin tener el poder. 

MORENA pasará a la historia, sólo falta saber cómo es que pasarán a ella. 

@AtticussLicona