Se dice en los cafés políticos que pareciera que la mayoría de columnistas y articulistas están desde hace mucho en contra de las medidas económicas y sociales anunciadas y realizadas por López Obrador, y muchos dogmáticos de la 4T piensan que se oponen solo por llevar la contraria. Sin embargo, la realidad y los ajustes que ha debido hacer AMLO han demostrado todo lo contrario: que sus críticos al final de cuenta sí tienen razón. 

Por ejemplo, se criticó que AMLO continuara con la equivocada política de ‘Puertas abiertas’ de Peña Nieto al permitir el paso de migrantes hacia los Estados Unidos. Al final, el presidente tuvo que corregir el rumbo ante las amenazas de Trump. 

Se criticó que ordenara a las fuerzas armadas y policías federales no reprimir. Las consecuencias fueron gravísimas y hoy AMLO, obligado por el reclamo de los altos mandos militares, debió recular y advertir a ese ‘Pueblo bueno’ que asalta, que se burla de la autoridad, que mata y que secuestra, que eso se acabó. 

Se criticó el derrame de liquidez indiscriminado hacia determinados grupos sociales y hoy se sabe que ese ‘Pueblo bueno’ se aprovechó del modelo y muchos cobran los programas sociales sin merecerlos y muchos más se han quedado sin los beneficios. 

Se criticaron las promesas y ofertas que AMLO hizo a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, ese gremio político de porros insaciables a los que como no les satisfizo la contra reforma educativa, paralizaron la economía de medio país bloqueando vías del ferrocarril y carreteras, que han hecho con el país lo que han querido y al que se le ha concedido más allá de lo prudente. Ahora, como dice Carlos Marín, director de Milenio, solo falta que AMLO ponga a un integrante de la CNTE al frente de la SEP en lugar de Esteban Moctezuma. De este trato terso y tolerante, finalmente también deberá recular. 

Una cosa hay que reconocer, AMLO parece que sabe recular, pero como dijo aquel, ¿Pero qué necesidad, para qué tanto problema? 

Quienes critican quizá no sean especialistas de todo, pero tienen algo que vale mucho: sentido común. 

Canillazos para AMLO que ha propuesto medidas que parecen razonables pero que al final, luego de incendiado el bosque, ha tenido que echarlas para atrás.