No, la culpa no es de la fiscal encargada. La Fiscalía General del Estado está sin dinero para operar. No tienen ni para la gasolina.
Ayer, personas vinculadas a los operativos de la Policía Ministerial, viejos conocidos míos de cuando yo era reportero y cubría la fuente policiaca, de confianza, pues, a temprana hora me hicieron llegar un mensaje.
“Amigo, buenos días. Te comentamos que están disparadísimos los secuestros. Crecen las cifras y no se resuelven”.
Me dijeron que muchos casos no se denuncian, pero que aun así está elevándose mucho la cifra y que no hay capacidad de respuesta.
“El personal es insuficiente, hay mucha falta de recursos materiales. Imagínate, no hay para viáticos, para gasolina, etc.”.
Agregaron a ello la llegada de nuevo personal sin experiencia, pero me insistieron en que lo más grave es la falta de recursos y de equipo.
No hay dinero, pues. Que se sepa, la situación no es privativa de la Fiscalía. De la Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas (SIOP) me han dicho lo mismo: que no tienen ni siquiera hojas para trabajar.
No llegan recursos económicos a las dependencias. ¿Qué le hacen, qué le han hecho al dinero presupuestado?
En noches pasadas, en un funeral, un exfuncionario se me acercó para decirme que le habían ofrecido un “negocio”, un contrato de una cantidad considerable pero a cambio de una “tajada”, de un “moche”.
“Me dijeron que me lo asignaban pero que el setenta de la comisión era para ellos porque necesitan dinero para el Tren Maya”. Dice que no aceptó.
Es solo su dicho. No me consta ni hay pruebas, aunque dan ganas de creerle. |