Acerca del poder y la soberbia de los Yunes se habló en los cafés este jueves… pero no de los Yunes Pepe, Héctor o Miguel Ángel, sino de los hijos de este último. 

Y es que la soberbia, por ejemplo, de Fernando, no tiene límites y el poder que ejerció Miguel Ángel chico durante los años en que gobernó su padre fue grosero y ambicioso.  

Lo anterior vino al caso por las recientes expresiones despectivas y arrogantes que lanzó Fernando ante la falta de acercamiento con él del Secretario de Seguridad Pública, Hugo Gutiérrez Maldonado. ‘Es, posiblemente, porque se siente menos al estar a mi lado’, dijo.  

Y de Miguel Ángel recordaron el poder desmesurado que ejerció tras bambalinas en el gabinete de su padre. El papá puso a sus amigos ‘dinosaurios’ como Téllez Marié en Seguridad Pública, al de Salud Arturo Iván Suárez Villa, al ‘Chapito’ Guzmán en Agricultura, a Clementina Guerrero en Sefiplan, a Julen Rementería en SIOP, a Enrique Pérez en la SEV y a Manuel Muñoz Gánem como su gurú personal en la Oficina del Gobernador… ¡Ah! Pero de todos fue conocido que los administrativos, quienes en realidad movían el abanico, eran puestos otorgados a incondicionales de Miguel Jr. 

Además, aparte de dichas figuras, los demás fueron colocados también por Miguel Ángel Yunes Márquez, además de la mayoría de los Subsecretarios, Jefes de las Unidades Administrativas y la mayoría de los diputados en el Congreso. Los ‘dinosaurios’ no se quejaban con el gobernador, porque le temían, dicen, pero sí lo comentaban con amigos y entre ellos. Se sentían anulados, decían. 

Quizá mucho de ello salga a relucir tarde o temprano, ya que muchos han dicho que no se la van a tragar solos, ya que muchas de las observaciones del ORFIS no fueron operadas ni ordenadas por ellos. 

Los canillazos son para los hijos Yunes Márquez, pues aseguran que no se midieron.