La tarde de este martes abordé un taxi en la avenida Lázaro Cárdenas para dirigirme a la Universidad del Golfo de México (UGM), ubicada a unos metros de Plaza Crystal, donde el dirigente estatal del PRI, Marlon Ramírez, habría de ofrecer una conferencia sobre “Agenda Pública”. 

En el camino el operador del vehículo de alquiler me hizo notar que “algo estaba pasando” justo en la entrada a Wal-Mart, pues se habían congregado varias patrullas de la policía estatal.

Por inercia revisé las redes sociales y crucé información con algunos colegas, quienes en ese momento no supieron darme información sobre lo que ahí sucedía.

A mi llegada al plantel, me encontré a la siempre inquieta Corintia Cruz Oregón, y me enteré de un desagradable suceso que había sufrido su familia.

La propia Corintia lo subió a su cuenta de Twitter:

“Acaban de asaltar con cuchillo en mano en Toks de Plaza Animas... mi familia que estaba presente se llevó un gran susto, GAD pudieron escapar. #EstáCabrón En qué Estado bajaron los índices delictivos? Obviamente en #Veracruz NO”.

Lo narrado me impactó, pero no lo asocié a la movilización policiaca que acababa de presenciar, hasta que minutos más tarde me llegó la información que había pedido.

La propia Secretaría de Seguridad Pública dio a conocer que montó un operativo en la avenida Lázaro Cárdenas de Xalapa, tras recibir el reporte de un asalto registrado en Plaza Ánimas.

La información que le llegó a la policía fue que “un sujeto con arma blanca amenazó a empleados y clientes del restaurante Toks, ubicado en Plaza Ánimas, despojándolos de equipos celulares”.

Para huir el asaltante abordó un vehículo Chevrolet Monza, color gris, que se incorporó a la avenida Lázaro Cárdenas con dirección a Banderilla.

El operativo permitió ubicar en pocos minutos al sospechoso y se inició una persecución que concluyó en el estacionamiento de Wal-Mart, lugar en donde fue detenido el presunto asaltante y una persona que lo acompañaba.

Alarma que la delincuencia haya llegado a tal nivel de arrojo, que a plena luz del día, en un sitio tan concurrido como una plaza comercial, un sujeto solitario sea capaz de amagar a clientes y empleados para despojarlos de sus pertenencias.

Alarma que los delincuentes asuman que las fuerzas del orden serán incapaces de capturarlos.

Es un alivio saber que no todas son malas noticias. Que hay elementos policiacos comprometidos con su trabajo y que todos los días se esfuerzan para brindar protección a los ciudadanos.

Ya se ha dicho hasta la saciedad, pero no está de más insistir en ello: La manera más eficaz para abatir los índices delictivos, es acabar con la impunidad.

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