Cómo aquí se adelantó Rosario Robles Berlanga no se escapa del juicio político que desde el Congreso de la Unión se le ha iniciado por el desvío de más de 5 mil millones de pesos cuando en el gobierno Peñista ejerció como titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano.

Como es sabido Rosario Robles está presa en un reclusorio de la CDMX y de inmediato a través de sus abogados tramitó un amparo federal, mismo que ayer el Juez Primero de Distrito en materia administrativa simplemente sin dar más detalles desechó. 

En sí, el famoso juicio político no es más que una parte más de un show mediático, puesto que por esos delitos ya se le sigue un juicio penal privada de su libertad. Sin embargo, mientras la FGR no es capaz de poner tras las rejas a peces gordos como Emilio Lozoya exdirector de Pemex, al líder petrolero Carlos Romero Deschamps, al expresidente Felipe Calderón, Vicente Fox o Enrique Peña Nieto, algo es algo dijo un calvo para que la 4T confirme su cruzada contra la corrupción. 

A propósito de este último punto, cuándo se dará cuenta AMLO de que mientras arriba no castigan a nadie por corrupción -que los hay- abajo la gente ya les perdió el miedo y por cualquier trámite por insulso que sea, le siguen sacando dinero a la gente.