Este medio día los veracruzanos pudieron enterarse a través de radio XEU debieron pasar del asombro, al enojo y a pensar en la forma de ayudar al señor Rodolfo Ortega.

¿Qué le pasó a Rodolfo?

Hechos que asombran:

Hace años tuvo la desgracia de electrocutarse y perder los dos brazos.

Buscó trabajo y fue marginado por su condición de incapacitado. Nadie le daba trabajo. Sin embargo, Rodolfo se sobrepuso a su desgracia cuando una persona se solidarizó con él y le dio trabajo para manejar un taxi.

El taxi fue adaptado y durante 11 años de eso ha vivido y mantenido a su familia. Jamás ha recibido una multa ni ha cometido infracciones y su trabajo honesto y de calidad le ha dado muchos y muy buenos amigos.

Hechos que enojan.

Sin embargo, este día personas sin escrúpulos, valores, ni principios le robaron su taxi, aprovechando que él y su familia bajaron a comprar víveres e una tienda.

¿Verdad que hierve la sangre, que vivamos en una sociedad llena de maldad, abusivos, carente de sentido humano?

¿Cómo ayudar?

Las mentes se obnubilan ante rufianadas como esta.

Aquí en este portal se pensó primero en darlo a conocer a nuestros justos y solidarios lectores. Cada uno encontrará la manera de ayudar a Rodolfo. El no necesita caridad, requiere solidaridad.

Se ha informado que el taxi ya apareció, saqueado pero apareció. Elementos policíacos lo localizaron abandonado sin llantas delanteras, sin batería ni las pertenencias del señor  Rodolfo Ortega,  en la colonia López Arias de la Ciudad de Veracruz.

Sin embargo, el tema no puede, no debería quedarse así. La Fiscalía General del Estado debe iniciar una investigación a fondo y poner tras las rejas a los rufianes que fueron capaces de cometer tal atrocidad.

Además, por una vez en su vida, aquellas personas que se dedican a compran objetos robados pudiera ayudar a esclarecer este caso.Alguna persona que haya sido testigo de cuando se llevaron el taxi o cuando lo desvalijaron pudieran hacer su obra del día.

Alguien, con toda seguridad se dio cuenta del caso y podría ayudar a que se resuelva este penoso y triste caso, en el que el Señor Rodolfo Ortega pudo quedar impedido de llevarle el alimento a su familia.

La sociedad puede hacer mucho. Háganlo.