Que no los confundan.

La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, -cuyos ordenamientos predominan por encima de las constituciones locales- establece en su Artículo 116, fracción primera, inciso b: “Sólo podrá ser gobernador constitucional de un Estado un ciudadano mexicano por nacimiento y nativo de él, o con residencia efectiva no menor de cinco años inmediatamente anteriores al día de los comicios, y tener 30 años cumplidos el día de la elección, o menos, si así lo establece la Constitución Política de la Entidad Federativa”.

En efecto, ni Rocío Nahle, ni Ricardo Ahued, son nacidos en el territorio veracruzano, y tampoco son hijos de veracruzanos, pero cumplen, con creces, la opción de comprobar una residencia efectiva muy superior a los cinco años que exige este mandamiento.

Este tema, que se mantenía guardado hasta que se acerquen los tiempos de sucesión, se revivió tras un trascendido publicado por el periódico El Universal, en la columna llamada Kiosko: “¿Se animará secretaria de AMLO por gubernatura? Nos platican que la visita que este miércoles hizo por Zacatecas Rocío Nahle García, secretaria de Energía, causó revuelo, ya que al parecer la clase política de ese estado candidateó a su paisana como posible aspirante a la gubernatura en 2021. Nos dicen que, para salir de dudas, se le preguntó a doña Rocío, quien con una enorme sonrisa sólo se limitó a decir: ‘¡Ah, caray! Bueno, yo soy zacatecana de nacimiento. Estoy cubriendo ahorita la Secretaría de Energía y, pues, vamos a trabajar fuerte en eso’. Sin embargo, nos comentan, la respuesta para muchos significó que, si bien no confirmaba, tampoco negaba que pudiera interesarse en buscar la gubernatura. Aunque ahora, las interrogantes son ¿a qué gobernador estaría más interesada en suceder doña Rocío? ¿Al priista Alejandro Tello Cristerna o al morenista Cuitláhuac García?, porque ella ha dicho que su ombligo está en Zacatecas, pero su corazón en Veracruz. ¡Qué tal!”.

Desde que se supo que Cuitláhuac García Jimémez había ganado la elección, en el 2018, se empezó a especular sobre sus posibles sucesores y los nombres de Rocío Nahle y Ricardo Ahued suelen encabezar las listas entre aquellos que tienen más posibilidades.

Ambos recorrieron la entidad veracruzana haciendo campaña para llegar al Senado de la República (Rocío encabezaba la primera fórmula, con la maestra Gloria Sánchez como su suplente, mientras que Ahued iba en la segunda fórmula, acompañado de Ernesto Pérez Astorga).

Ambos solicitaron licencia para integrarse al equipo de trabajo de Andrés Manuel López Obrador. Rocío Nahle desde el 27 de noviembre del 2018 para asumir la titularidad de la Secretaría de Energía, y Ricard Ahued a finales del mes de mayo del 2019, para hacerse cargo de la Administración General de Aduanas.

Una versión que fue tomando fuerza en fechas recientes, refería que Rocío Nahle (sin discusión la más cercana y de mayor influencia con el Presidente) estaría impulsando la salida anticipada de Cuitláhuac García del gobierno de Veracruz, y la designación, como gobernador sustituto, de Ricardo Ahued.

Si eso sucediera, Rocío Nahle se estaría librando de –quizá- el más fuerte competidor por la candidatura en el 2024 y, reconociéndole sus capacidades, la secretaria de Energía asume que con Ahued la gestión estatal mejoraría y ella encontraría condiciones más favorables para conseguir que los veracruzanos apostaran una vez más por un gobierno de Morena.

Esto es lo que se escucha en los pasilos de los gobiernos de Morena, por lo que su certeza es más bien cuestionable, y de corresponder a la verdad, faltaría que todos esos cálculos fueran correctos y que no surgieran imponderables, que en política nunca faltan.

Haga sus apuestas.

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