La ciudadanía aplaude que desde el Congreso de Veracruz se busque prohibir la instalación en la vía pública de boyas, topes, piedras o cualquier objeto que invada las arterias y obstaculice la vialidad en banquetas, comercios u oficinas.

La medida fue aprobada luego de que la sensibilidad del diputado Ricardo Arturo Serna Barajas la inició el pasado 31 de julio.

La votación fue unánime al conseguir 48 votos en favor, porque dos diputados no se presentaron a votar.

Pero además de lo anterior la Ley establece que los conductores no podrán obstruir la circulación de otros vehículos y de las personas, ni invadir las áreas de rodamiento o las zonas reservadas para el paso peatonal o las entradas y salidas de cocheras.

Y si lo anterior es plausible mejor lo será si acompañan la medida con elementos suficientes que la apliquen para que no quede en saliva y papel como tantas leyes que solo sirven para el archivo.

Además, la medida debió ser acompañada de otras para fomentar la construcción y mejoramiento de estacionamientos, pues en Xalapa es una real necesidad.

Al menos esta misma ley debía servir para obligar a los actuales empresarios de estacionamientos a dar un mejor servicio, pues la mayoría están para llorar.