Probablemente habrá oído de un tesoro oculto, del orden actual de 80 billones de pesos, que se forjó desde el siglo XIX para que supuestamente México fuera reconocido como país. 

Un tipo de nombre Mauricio Montijo Lucero, que se dice representante de una Etnia llamada Pápagos de Sonora, señala que él es el único que puede reclamar y traer ese dinero de regreso al país, pues asegura que pertenece a todos los mexicanos. 

Entre sus dichos señala que ya se pagó un billón de pesos de ese Tesoro que está en bancos extranjeros, por impuestos al SAT, pero que Enrique Peña Nieto lo ocultó diciendo que solo se informó de un repatriamiento de por lo menos cuarenta mil millones de dólares. 

El galimatías ha entretenido a México y a gente supuestamente seria por varios meses. El tipo y la historia tienen un tufo del pajarito que le habla al oido al jarochoco. 

Sin embargo, si en verdad existe ese tesoro, la solución es sencilla: que Montijo se traiga el dinero. Nada se lo impide según él. Si fuese el caso, ¿En dónde están los supuestos depósitos que se han recibido por los rendimientos obtenidos a la fecha? 

Al respecto, con relación a esta increíble historia de los Pápagos y el Tesoro Oculto de los mexicanos, se han escrito muchos artículos y se han hecho hasta reportajes serios... pero la verdad, hasta hoy, todo parece ser mera ficción. No obstante, si Peña Nieto lo ocultó, bien podría AMLO encontrarlo y meterlo en su institución para devolver al pueblo lo robado, ¿O no? 

Esta es otra historia de la Tremenda Corte y del cubanito Tres Patines (Esta es una perla de Joan Rega, colaborador especial para términos económicos de Política al Día).